Javier Milei debuta en el G20 con una postura desafiante ante la agenda de Lula

Javier Milei aterrizó en Brasil con una clara intención de marcar su postura en la cumbre del G20 que se llevará a cabo entre este lunes y martes en el Museo de Arte Moderno de Río. Acompañado por el ministro de Economía, Luis Caputo, y el flamante canciller, Gerardo Werthein, la comitiva argentina llega con fuertes reservas frente a la agenda que impulsa el anfitrión Luiz Inácio Lula da Silva, centrada en temas como el cambio climático, los derechos de género y la transición energética.

La cumbre del G20 reúne a líderes de las principales economías del mundo, como Joe Biden (EE.UU.), Xi Jinping (China) y Emmanuel Macron (Francia). Sin embargo, las diferencias entre Argentina y Brasil podrían poner en riesgo la declaración final del evento.

Fuentes diplomáticas aseguran que Milei se opone a suscribir cualquier acuerdo que incluya menciones al cambio climático y políticas de género, puntos que son clave en la agenda de Lula. "Un escenario posible es que Argentina se niegue a firmar la declaración final o lo haga con una serie de reservas que dejarán en evidencia sus discrepancias", señaló el diario OGlobo .

Un debut con grandes expectativas: la reunión con Xi Jinping

El evento no solo marca el debut de Milei en el G20, sino también su encuentro esperado con el presidente chino, Xi Jinping. Pese a sus críticas pasadas a China, Milei ha optado por un acercamiento pragmático en medio de la posibilidad de un nuevo proteccionismo estadounidense bajo una eventual presidencia de Donald Trump. "La prioridad es explorar acuerdos que puedan beneficiar a Argentina, especialmente en un contexto internacional cada vez más volátil", afirmaron fuentes cercanas al mandatario argentino.

El presidente argentino también tiene en su agenda reuniones clave con líderes como Giorgia Meloni, jefa de gobierno italiana, quien visitará Buenos Aires tras la cumbre.

La postura de Argentina también generó roces en la discusión sobre el conflicto en Ucrania. Milei exige una condena explícita a Rusia, algo que Lula y otros países buscan evitar en favor de un llamado al diálogo y cese del fuego. "Argentina es uno de los principales obstáculos en la recta final de las negociaciones", revelaron diplomáticos brasileños, quienes destacan que la Casa Rosada ya ha manifestado su oposición en temas similares a lo largo del año.

La estrategia conservadora de Milei en la escena internacional

El nuevo presidente argentino realizó un giro drástico en la política exterior, alineándose con la agenda conservadora que comparte con líderes como Trump y Meloni. Tras el despido de la excanciller Diana Mondino, Milei priorizó un enfoque crítico hacia los organismos multilaterales y la Agenda 2030 de la ONU, que promueve el desarrollo sostenible.

Desde su asunción, Argentina votó en contra de resoluciones de la ONU sobre derechos de mujeres, niñas y pueblos indígenas, y retiró a su delegación en la cumbre climática COP29 en Bakú. "Milei busca liderar un bloque de resistencia conservadora en América Latina, enfrentando políticas que consideran parte de una agenda globalista 'woke'", indicaron analistas.

La cumbre también marcará la última participación del presidente Joe Biden en el G20, en medio de expectativas sobre un posible retorno de Donald Trump al foro en 2025, cuando la próxima edición se celebrará en Sudáfrica. Mientras tanto, Rusia estará representada por su canciller Serguéi Lavrov, dado que Vladimir Putin no asistirá pese a la invitación de Lula.

Con un escenario geopolítico en constante cambio, el G20 de Río promete ser una cumbre clave para definir el futuro de las relaciones internacionales, especialmente en América Latina. Milei llega a la cumbre con una agenda que busca desafiar las políticas de consenso global, priorizando sus intereses nacionales en un contexto donde la polarización política sigue aumentando.