Este martes murieron nueve personas y al menos 2.750 resultaron heridas, 200 de ellas con signos de gravedad. El suceso fue a raíz de la explosión en cadena de localizadores de mensajería que estaban en manos de miembros de Hezbollah en varios puntos del Líbano, informó el Ministerio de Salud Pública de ese país.

Hezbollah anunció que, entre los fallecidos, se encontraban tres miembros del grupo y una niña de nueve años, hija de uno de los integrantes. La menor fue identificada como Fatima Jaafar Abdullah. 

Según medios locales, como el Jerusalem Post y la agencia de noticias Reuters dijeron que los buscapersonas llevados por miembros de Hezbollah fueron detonados. Además, indicaron que se creía que había sido un ataque israelí.

Varios miembros libaneses del grupo terrorista también fueron trasladados a hospitales de la capital siria, Damasco, y sus alrededores tras la explosión de sus buscapersonas, que se produjo al mismo tiempo que las explosiones en El Líbano, informó el medio saudí Alhadath.

Según Reuters, los dispositivos que explotaron eran de última generación y fueron introducidos por el grupo terrorista en los últimos meses.