Alberto Fernández se presentará a indagatoria por violencia de género en Comodoro Py
El expresidente debe declarar este martes por lesiones agravadas y coacción contra Fabiola Yáñez, pero su defensa insistió con suspender la audiencia.
Alberto Fernández enfrenta una citación judicial clave este martes a las 11 en Comodoro Py 2002. El expresidente está imputado por "lesiones leves doblemente agravadas, violencia de género y coacciones" contra la exprimera dama Fabiola Yáñez. Sin embargo, su defensa presentó nuevos recursos en un intento por frenar la audiencia, que eran analizados por el fiscal federal Ramiro González y el juez Julián Ercolini.
Según fuentes judiciales, la defensa de Fernández argumenta presuntos vicios procesales y busca dilatar la investigación. No es la primera vez que intenta esquivar esta instancia: ya había logrado varias postergaciones el año pasado con estrategias similares.
Las graves acusaciones contra el expresidente
Fernández enfrenta una investigación por hechos ocurridos desde 2016 hasta agosto de 2024 en un "contexto de violencia de género signado por una relación asimétrica de poder", según determinó el juez Ercolini. Las pruebas incluyen capturas de imágenes enviadas por Yáñez a su ex secretaria, Sofía Pacchi, y pericias extraídas del celular de esta última en la causa de los Seguros.
La ex primera dama declaró por videoconferencia desde Madrid, donde vive con su hijo Francisco. También testificaron ex empleados de la Quinta de Olivos, niñeras del niño, su esteticista y médicos que la atendieron. La fiscalía determinó que hubo "violencia psicológica, física y económica" en base a la Ley 26.485 de Protección Integral a la Mujer.
Esta no es la única investigación que enfrenta el ex mandatario. En noviembre pasado, Fernández fue indagado por su presunta participación en un esquema de contratación irregular de "brokers" para la suscripción de pólizas de seguros estatales, también bajo la instrucción de Ercolini. La resolución de su situación procesal en esa causa aún está pendiente.
De confirmarse la acusación por violencia de género, Fernández podría enfrentar una pena de hasta 18 años de prisión. Mientras tanto, su estrategia sigue siendo la misma: intentar frenar el avance judicial con recusaciones y pedidos de suspensión.
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