En medio de las tensiones políticas, el Senado se prepara para una nueva actualización de las dietas de sus legisladores. A partir del 1 de enero de 2024, los senadores podrían ver un aumento significativo en sus salarios, alcanzando los 9,5 millones de pesos mensuales, debido a la ley de enganche aprobada durante el gobierno de Cristina Kirchner.

Este incremento se produce porque el 31 de diciembre vencerá la resolución que mantenía congelados los sueldos desde hace varios meses. La vicepresidenta, Victoria Villarruel, había solicitado que el tema del congelamiento se tratara en la última sesión, pero no obtuvo respuesta. Por lo tanto, la discusión sobre el aumento de dietas sigue siendo un tema pendiente.

Villarruel Aboga por el Congelamiento, pero los Senadores Piden Actualización

La situación está en vilo, ya que Villarruel ha mostrado su intención de prorrogar el congelamiento de las dietas, sugiriendo que los salarios de los legisladores deberían mantenerse sin cambios por el momento, en un contexto de alta inflación. En una conferencia de prensa reciente, la vicepresidenta remarcó que el Congreso debería "estar a la altura de las circunstancias" y evitar un aumento en las dietas. Sin embargo, algunos senadores han expresado que prefieren una actualización salarial por debajo del índice de inflación.

La discusión ha generado tensión dentro del Senado, y aunque la resolución de congelamiento vence en pocos días, no se espera una reunión inmediata del cuerpo legislativo. Algunos proponen que Villarruel firme una resolución que extienda el congelamiento hasta marzo de 2024, cuando comiencen las sesiones ordinarias, aunque la mayoría prefiere un aumento más moderado.

El Impacto del Sistema de Enganche y los Aumentos Previos

El sistema de "enganche" que se implementó en abril de 2023, permitió que las dietas de los senadores se actualizaran de manera automática, con un aumento del 400%. Esto elevó el salario bruto de $1,9 millones a más de $7,8 millones, y con los descuentos se quedó en alrededor de $7 millones netos. En agosto, debido a la presión social, se suspendió la aplicación de este sistema, y los sueldos fueron ajustados a los valores acordados en abril.

A pesar de estas suspensiones, las últimas estimaciones indican que, con los aumentos aprobados en los meses previos, los senadores podrán llegar a cobrar más de $9,5 millones a partir de enero. Esta cifra genera controversia en un contexto de alta inflación, donde los salarios de los diputados se encuentran mucho más retrasados en comparación, con un salario base de $3,5 millones más adicionales por desarraigo.