Carlos Cisneros, dirigente sindical y diputado nacional, realizó un análisis exhaustivo del primer año de la gestión de Javier Milei, destacando diversos puntos clave como la inflación, las reformas laborales y privatizaciones, además de su postura frente al Congreso y a las leyes más discutidas.

Inflación y su impacto en jubilados y la sociedad general

Cisneros comenzó analizando los efectos de la inflación bajo la administración de Milei, especialmente en sectores vulnerables como los jubilados y los trabajadores. A pesar de los anuncios del gobierno, Cisneros es tajante al señalar que la situación es cada vez más difícil para estos sectores.

"Ha sido un año difícil para los trabajadores, para los jubilados, a pesar de lo que se anuncia, a pesar de que se dicen los medios, a pesar de que no hay inflación, nosotros cada vez vemos más inaccesible a trabajadores y jubilados a acceder a necesidades básicas, salud, medicamentos, comida", explicó. De acuerdo con él, a pesar de la propaganda oficial, los sectores más vulnerables continúan sintiendo el peso de la inflación y la falta de políticas efectivas para frenar este fenómeno.

Reformas laborales y privatizaciones: ¿Qué pasa en el Congreso?

Cisneros también se refirió al tratamiento de reformas laborales y privatizaciones en el Congreso, y dejó claro que no está de acuerdo con muchas de estas iniciativas. En primer lugar, criticó duramente a algunos legisladores que impulsan reformas que, según su opinión, no benefician a los trabajadores."Los diputados nacionales tenemos reelección indefinida. Y había un proyecto del radicalismo de que los dirigentes sindicales no podían ser electos por más de dos periodos. Resulta que los que pedían limitar las reelecciones de los dirigentes sindicales tienen reelecciones indefinidas", dijo, refiriéndose a la inconsistencia de algunos de los legisladores que promueven tales medidas.

Cisneros también mostró su preocupación por los intentos de privatización de empresas estatales, como el Banco Nación, y dejó en claro que las políticas de privatización no tienen el apoyo de los gremios.

Aseguró que muchos de los diputados que respaldan estas reformas "no están moralmente habilitados" para tomar decisiones que afecten los derechos de los trabajadores. 

coherencia política y postura sobre EL FINANCIAMIENTO UNIVERSITARIO

Cisneros también se refirió a su postura frente a diversas leyes fundamentales discutidas en el Congreso, como la Ley Bases, la Ley Ómnibus, la Ley de Financiamiento Universitario y la Ley de Haberes Provinciales. En todos estos casos, el diputado fue claro en su posición de votar manteniendo su coherencia con las posturas políticas que defiende.

"Yo siendo diputado del oficialismo en el gobierno de Alberto, me abstuve de acompañar los proyectos del oficialismo porque iban en contra de los jubilados. Yo no nací diputado de la Nación. Yo soy un hombre del movimiento obrero, yo soy un dirigente sindical", manifestó. 

 En cuanto al financiamiento universitario, subrayó una paradoja en la que se encontraban los debates. Afirmó: "Siempre se ha dicho, y lo conocemos todos, que la caja de las universidades era para financiar la política de la Unión Cívica Radical." Esta crítica se centró no solo en el financiamiento, sino también en la necesidad de una auditoría más rigurosa de las instituciones públicas, algo que él consideraba indispensable. 

Cuando fue el tema universitario, porque era más allá del financiamiento, había cuestiones de auditoría, de las cajas y todo lo demás. Nosotros pensamos en la educación pública, no pensamos en la auditoría, no pensamos en quién se beneficiaba políticamente. 

 Señaló que fue contradictorio que "quienes terminaron perjudicando a los trabajadores votando a favor de la reforma laboral, eran diputados de la Unión Cívica Radical que pertenecían al brazo universitario, al brazo político que siempre les ha dado sustento, tanto en Córdoba como en Capital Federal". 

No es pecado auditar,  el tema es cuál es el mensaje que se busca dar. Nosotros entendíamos que se estaba desfinanciando y que no podíamos no estar a la par de los docentes universitarios.

 la demonización del Congreso y las listas negras de diputados

El dirigente sindical también se refirió a la demonización del Congreso y las listas negras de diputados. Según Cisneros, el clima de polarización y agresión política ha alcanzado niveles preocupantes. "Ahora estar de moda ser cruel, ser indolente", aseguró, señalando que el debate político se ha vuelto cada vez más agresivo, con una estrategia deliberada por parte del Ejecutivo para debilitar al Congreso.

Además, fue crítico con la postura del gobierno respecto a la relación con los legisladores y su intento de reducir la influencia del Congreso: "Lo que se busca es bajarle el peso y el poder político al Congreso", dijo, aludiendo a las tensiones internas y a las medidas tomadas por el Ejecutivo para concentrar poder en el Ejecutivo.

La crítica al gobierno de Alberto Fernández y la interna del PJ

Cisneros, al referirse al gobierno de Alberto Fernández, fue claro en su crítica: "Creo que el gobierno de Alberto fue muy malo y permitió que esto pase", señaló, refiriéndose a la crisis que vive el país y la falta de acción efectiva durante la gestión anterior. Según él, los errores del gobierno anterior fueron fundamentales para la situación que se enfrenta actualmente.

En cuanto a la interna del Partido Justicialista (PJ), Cisneros expresó su preocupación por la falta de liderazgo dentro del partido. "Yo nunca soy neutral. Hay compañeros que no toman nota que perdimos por errores nuestros. No surge un liderazgo potente. Yo siempre apuesto al futuro, a la gente joven", dijo, enfatizando que la falta de renovación generacional y la ausencia de un liderazgo fuerte son factores que han contribuido al fracaso electoral del PJ.