Celos, drogas y fiestas: lo que reveló el psicólogo de la mujer que saltó en Palermo
Los profesionales que trataron a la mujer mejoraron la situación del cirujano acusado. Descartaron prostitución forzada y hablaron de celos y consumo de drogas.
El psicólogo que trató a la mujer que se arrojó de un primer piso en Palermo declaró ante la justicia y brindó detalles clave sobre su relación con el cirujano plástico Fabián Peláez, acusado de privación ilegítima de la libertad y suministro de estupefacientes.
Según el profesional, la mujer lleva dos años en terapia de manera intermitente debido a su inestabilidad anímica. Las sesiones comenzaron por conflictos en la convivencia con la familia ensamblada de su pareja. Además, reveló que las prácticas sexuales con Peláez, incluyendo tríos, eran consensuadas, aunque la elección de la tercera persona generaba celos en la mujer.
El psicólogo también destacó que el consumo de drogas, como cocaína y éxtasis, era voluntario y no impuesto por Peláez. "Consumía con él por gusto", afirmó, aunque reconoció que estas sustancias afectaban negativamente su estado de ánimo y su vida cotidiana.
La declaración de la psiquiatra
La psiquiatra que atendió a la mujer desde octubre de 2024 también declaró en la causa. Aunque no pudo realizar un diagnóstico definitivo, sospechó que la paciente padecía un trastorno del ánimo. Le recetó litio, quetiapina y paroxetina para estabilizarla, aunque advirtió que el consumo de drogas los fines de semana interfería con el tratamiento.
"Afecta en la evolución, en el resultado. No es una buena combinación los psicofármacos con las sustancias", explicó la médica. También negó que la mujer hubiera mencionado situaciones de sometimiento sexual o prostitución forzada.
La psiquiatra destacó que, en su última consulta, la paciente le comentó que viajaría a Buenos Aires de vacaciones, lo que sugiere que no se sentía en una situación de coerción.
El impacto en la causa contra Peláez
Las declaraciones del psicólogo y la psiquiatra mejoraron la situación legal de Fabián Peláez. Ambos profesionales coincidieron en que no había indicios de que el cirujano obligara a la mujer a prostituirse o consumir drogas.
Además, el psicólogo aseguró que la mujer nunca mencionó haber sido sometida o privada de su autonomía. "Ella lleva a cabo lo que desea, lo pone en acto", afirmó.
Estos testimonios descartaron la hipótesis de trata de personas y reforzaron la defensa de Peláez, quien sigue siendo investigado por otros delitos.