Una profunda conmoción embarga a la comunidad de Ingeniero Maschwitz tras el trágico asesinato de Sara Sosa, una jubilada de 90 años, quien fue golpeada hasta la muerte en su propia casa durante un intento de robo. El hecho ocurrió el martes 31 por la mañana en una vivienda situada en la calle Julián Aguirre, muy cerca de la ruta provincial 26, en el barrio San Miguel.

Según informaron fuentes policiales a TN, dos ladrones accedieron al domicilio y agredieron brutalmente a Sara, quien sufrió heridas irreversibles y falleció horas después en la Unidad de Diagnóstico Precoz (UDP) de la localidad, perteneciente al partido de Escobar. La única mercancía que los delincuentes lograron llevarse fueron una garrafa y carne del freezer, dejando a la comunidad consternada por la violencia del crimen.

El fiscal Claudio Aundjian, de la UFI N°5 de Escobar, lidera la investigación y ordenó varios allanamientos bajo la supervisión de la Jefatura Departamental. Durante estas operaciones, fue detenido un hombre de 46 años que poseía una bolsa con la carne congelada robada del hogar de la víctima. Posteriormente, se arrestó a un segundo sospechoso, de 47 años, identificado como cómplice en el delito. Los individuos, Luis César Benítez y Diego Gastón Acosta, tienen antecedentes por delitos similares y enfrentarán cargos de "robo en concurso ideal con homicidio criminis causa", lo que podría resultar en prisión perpetua.

Sara Sosa era madre de Miriam Pierotti, funcionaria y coordinadora de la Unidad de Gestión Comunitaria 12 del municipio de Escobar. La Iglesia Adventista de Ingeniero Maschwitz, donde la jubilada solía asistir, hizo un emotivo homenaje en sus redes sociales: "Comunicamos, con profundo pesar, el fallecimiento de nuestra querida hermana Sara Sosa (‘Tía Sarita', como la llamábamos muchos cariñosamente). Sabemos cuánto anhelaba ver el regreso de Cristo, y la reencontraremos en ese grandioso día. Oramos por su familia y amigos, para que Dios los acompañe y les dé fuerzas".