Continúan los reclamos salariales en Canal 10
El medio televisivo, que pertenece a la Universidad y al Gobierno provincial, sigue en el ojo de la tormenta pero esta vez por cuestiones salariales. ¿Qué dicen las autoridades?
El Canal de los Tucumanos o Canal 10, nuevamente es noticia pero esta vez por la falta de pagos e incumplimientos en los haberes de sus empleados. Fuentes cercanas a la empresa aseguran que hace tres meses que hay problemas a la hora de realizar las liquidaciones. Esto se suma a que los salarios están por debajo de la realidad inflacionaria.
UN RECLAMO QUE SE VUELVE MONÓTONO
Este 20 de noviembre, la empresa terminó de abonar los sueldos correspondientes al mes de octubre pero solo a los empleados en relación de dependencia. No ocurre lo mismo con los trabajadores contratados o tercerizados, quienes todavía no reciben respuestas de cuando se efectuaran sus transacciones.
¿QUÉ DICEN LAS AUTORIDADES?
Actualmente la SAPEM es presidida por el Ing. Leandro Díaz, quien sobre los incrementos en las mejoras salariales sólo declaró que "no hay plata". Lo cierto es que para el mes de septiembre, la empresa solamente otorgó una suba del 4%, cuando las pretensiones de los trabajadores giraban en torno al 10%, a modo de recuperar parte de lo perdido en el pasado. Tampoco aceptó, por ahora, otorgar una actualización del 5% para noviembre.
JORNADA DE ASAMBLEA
En respuesta al avasallamiento sobre los derechos de los trabajadores, el personal informativo decidió este miércoles continuar con las asambleas de forma permanente. Las mismas serán de una hora progresiva, iniciando el 14 de noviembre de 8 a 9 am.
En la reunión de hoy estuvo presente Diego Tomas, secretario gremial de la Asociación de Prensa de Tucumán (APT). Durante el encuentro se acordó con el referente de prensa: realizar inspecciones laborales, para verificar el cumplimiento de las condiciones de trabajo en el canal y ratificar el reclamo inicial, que incluye el pago en tiempo y forma de los salarios; el blanqueo de los adicionales no remunerativos; y una recomposición salarial acorde a la realidad inflacionaria, que les permita recuperar el poder adquisitivo perdido.