El Papa Francisco dio por inaugurado un Pesebre en el Aula Pablo VI del Vaticano con los que algunos tomaron como un fuerte mensaje político. Esto dividió las aguas en las redes sociales.

Es este pesebre, la representación más fiel del Nacimiento, se presenta al Niño Jesús acostado sobre un pañuelo palestino tradicional, llamado kufiya, lo que algunos interpretan como un mensaje de su apoyo a los habitantes de esa región.

El Papa aprovechó para pedir oraciones por todas las víctimas de la guerra en el mundo. La elección de Belén como origen del Nacimiento no es casual. Esta ciudad, cuna de Jesús, es considerada un símbolo universal de paz. Sin embargo, en la actualidad, Belén se encuentra en una situación de conflicto, lo que hace que el mensaje del Papa sea aún más relevante.

Quienes no estaban de acuerdo con el acto, en las redes sociales, mostraron su enojo con "el Papa comunista" o "papa islámico" por "cometer un acto de claudicación frente al islam radical".