En el operativo del sábado por la noche, se secuestraron celulares y facas, intensificando las medidas de control a los presos.

En la publicación, titulada "Cada vez la van a pasar peor", se mostraron imágenes de los reclusos sentados en el suelo, fuertemente custodiados. El gobierno provincial reafirmó su compromiso de combatir la actividad criminal desde las cárceles y restaurar la tranquilidad de los ciudadanos.

La requisa se centró en los pabellones con internos vinculados a bandas narcocriminales y aquellos de alto perfil. Lucía Masneri Calderari, secretaria de Asuntos Penales, informó que se revisaron casi 250 personas y se continuará con requisas preventivas en cualquier momento del día.

La cárcel de Piñero fue escenario de incidentes violentos en el pasado, incluyendo ataques para liberar detenidos. Desde el inicio de la gestión, el gobierno ha implementado medidas para reforzar el control en las cárceles y trasladar a detenidos de alto perfil hacia unidades penitenciarias.