En un día complicado para los mercados internacionales, los activos argentinos profundizan su tendencia negativa. Las acciones de empresas nacionales que cotizan en Wall Street (ADR) sufren bajas de hasta un 8%, mientras que los bonos en dólares retroceden hasta 1,8%, con el Global 2041 entre los más afectados.

El impacto también se refleja en el índice Merval, que acumula una pérdida del 19% desde su pico máximo en enero y este martes cae casi un 6% en dólares medidos al contado con liquidación.

El riesgo país vuelve a escalar y marca su nivel más alto en 2025

El indicador de JP Morgan, que había tocado mínimos a principios de año, superó nuevamente los 700 puntos, ubicándose en 705 unidades, su valor más alto en lo que va de 2025.

Cabe recordar que el riesgo país había perforado artificialmente los 400 puntos el 7 de enero, pero desde el pago a los bonistas de esa misma semana, la tendencia fue alcista.

Bancos y empresas en la mira: los más castigados del día

Los papeles financieros son los que más sufren la caída del mercado. En Wall Street, el ADR de Banco Galicia retrocede 8%, seguido por BBVA (-7,2%) y Telecom (-6,9%). En la bolsa local, BBVA lidera las bajas con una pérdida del 6,3%, seguido por Banco Galicia y Supervielle, con retrocesos del 5,7% cada uno.

Corrección o tendencia: ¿qué dicen los analistas?

Expertos del Grupo SBS advierten que el mercado local muestra una tendencia bajista sostenida desde el pago de cupones de bonos soberanos en dólares, lo que mantiene al riesgo país en niveles elevados.

"El ajuste actual puede ser una corrección tras el rally de los activos argentinos en 2024, pero hay factores a seguir de cerca, como el tipo de cambio y la volatilidad externa", explicó el economista Juan Manuel Franco.

Mientras tanto, analistas de PPI ya habían alertado sobre la fuerte toma de ganancias en febrero: "Tras tocar los 2.387 dólares el 9 de enero, el Merval ya corrigió un 19% y en la última semana, casi todos los ADR argentinos acumularon pérdidas".

El escenario sigue abierto y los mercados estarán atentos a cualquier señal política o económica que pueda marcar el rumbo de los activos argentinos en las próximas semanas.