El consumo masivo se desplomó un 22,3% interanual en septiembre
La caída se atribuye tanto al contexto recesivo actual como a los altos niveles de consumo del año pasado, marcados por la incertidumbre económica.
El consumo masivo sigue en caída libre, registrando un retroceso del 22,3% interanual en septiembre, según el último informe de Scentia, la consultora especializada en el sector. Este descenso se atribuye no solo a la recesión actual, sino también al elevado nivel de consumo del año pasado, que había sido estimulado por la incertidumbre cambiaria y la campaña electoral.
Osvaldo del Río, director de Scentia, explicó que el consumo del año pasado había alcanzado alzas poco frecuentes, cercanas al 15% a partir de agosto, ya que muchos hogares se apresuraron a stockearse ante la expectativa de una inminente devaluación, que finalmente se concretó en diciembre. "Las bases del año pasado pesan mucho. Desde abril, el consumo se ha mantenido estable, ni cae pero tampoco crece", señaló Del Río.
Expectativas para los próximos meses
Se espera que octubre y noviembre muestren caídas similares al 22,3% de septiembre, debido a que los volúmenes de venta se compararán con períodos de alto consumo del año anterior. Sin embargo, a partir de diciembre, las estadísticas podrían revertirse, ya que se compararán con niveles de consumo históricamente bajos.
En el acumulado del año, el consumo cayó un 13%. Si se comparan los primeros nueve meses de 2023 con el mismo período del año anterior, el retroceso es del 10%. Las caídas fueron diferentes entre los distintos canales de venta: los supermercados del AMBA registraron una disminución del 19,4%, mientras que en los autoservicios y comercios independientes la caída fue más moderada, del 4,5%.
Rubros más afectados
Entre los rubros que más sufrieron se encuentran los consumos "impulsivos", con una disminución del 32,3% en comparación con el año pasado. Las ventas de bebidas sin alcohol cayeron un 26,7%, y las alcohólicas un 25,1%. La categoría de alimentación tuvo un retroceso promedio del 19,6%, aunque los productos perecederos mostraron una caída menor del 16,8%.
A pesar de este panorama desalentador, el rubro de alimentación es el que menos se vio afectado en el acumulado del año, con una variación negativa del 7,7%, mientras que los productos perecederos acumulan una reducción del 7,2% desde enero.