El Gobierno evalúa privatizar la concesión del ex Gasoducto Néstor Kirchner
El ducto actualmente es propiedad de Enarsa, empresa que pertenece al Estado nacional, y es operado por la empresa Transportadora Gas del Sur (TGS).
La secretaria de Energía, María Tettamanti, confirmó que el Gobierno analiza privatizar la concesión del Gasoducto Perito Moreno (anteriormente Gasoducto Presidente Néstor Kirchner), que conecta los yacimientos de Vaca Muerta con Buenos Aires. La medida busca avanzar en la gestión privada de esta infraestructura clave para el transporte de gas natural.
Una obra estratégica bajo revisión
El gasoducto, construido durante las gestiones de Alberto Fernández y Javier Milei, es propiedad de la estatal Enarsa y operado actualmente por Transportadora Gas del Sur (TGS). Esta empresa, controlada por Pampa Energía y la familia Sielecki, presentó una propuesta de iniciativa privada para ampliar la capacidad de transporte en 14 millones de metros cúbicos diarios.
El proyecto fue declarado de "interés público" en una resolución oficial publicada este lunes y prevé una inversión inicial de USD 500 millones. Esta ampliación permitiría ahorrar en importaciones y subsidios, estimando un impacto positivo de USD 1.000 millones anuales durante los picos de consumo local.
Proceso de licitación y preferencia para TGS
El Ministerio de Economía conducirá un concurso público en el que tanto TGS como otras empresas podrán presentar ofertas para gestionar el gasoducto. Al haber propuesto la iniciativa, TGS tendrá preferencia en caso de igualdad de condiciones con otros oferentes.
La concesión implicará que Enarsa transfiera la operación del gasoducto, al menos parcialmente, a la empresa ganadora del concurso.
Ampliaciones previstas
La ampliación abarcaría trabajos en cuatro plantas compresoras del tramo que conecta Tratayén (Neuquén) con Salliqueló (Buenos Aires). Con una inversión adicional de USD 200 millones, TGS planea extender el sistema con 20 kilómetros de gasoducto paralelo y nuevas plantas compresoras para reforzar la distribución hacia el Área Metropolitana de Buenos Aires.
Cuando esté finalizada, la infraestructura podría alcanzar una capacidad total de transporte de 35 millones de metros cúbicos diarios, reduciendo significativamente la dependencia de importaciones.
El desafío de la transición energética
Con Vaca Muerta posicionada como la segunda reserva mundial de gas no convencional y la cuarta de petróleo, Argentina tiene una oportunidad clave para explotar sus recursos antes de que las demandas del cambio climático reduzcan el uso global de combustibles fósiles.