En diciembre 235 mil jubilados solicitaron el subsidio de medicamentos de PAMI: ¿Cuántos pudieron acceder al beneficio?
De los 7,9 millones de jubilados en Argentina, alrededor del 47% cobra el haber mínimo, lo que indica que muchas personas podrían quedar fuera de la cobertura de medicamentos.
En diciembre de 2024, más de 235.000 jubilados solicitaron el subsidio social que les permite acceder a medicamentos gratuitos a través del PAMI. Este programa fue una de las modificaciones que surgieron tras la eliminación gradual del plan Vivir Mejor, el cual otorgaba medicamentos sin costo alguno. Sin embargo, a pesar de la amplia demanda, solo el 70% de las solicitudes recibieron la aprobación para acceder al beneficio, mientras que el 30% restante fue rechazado.
El proceso ha generado incertidumbre y preocupación entre los adultos mayores, especialmente aquellos que ya enfrentan dificultades económicas. A continuación, analizamos los detalles de esta nueva etapa del subsidio social y los motivos detrás de los rechazos.
¿Por qué se rechazaron tantas solicitudes?
Según los datos obtenidos de PAMI, aproximadamente 70.000 de las solicitudes para el subsidio social fueron rechazadas en diciembre de 2024. Las razones detrás de estos rechazos no siempre fueron claras, ya que muchos jubilados no cumplían con todos los requisitos establecidos por la resolución 2537/24, que regula el acceso al subsidio.
En algunos casos, los afiliados ya habían solicitado el subsidio previamente y solo necesitaban modificar su medicación, lo que causó confusión. Sin embargo, algunos de los rechazos también podrían estar relacionados con criterios más estrictos, como el ingreso de los solicitantes o la posesión de bienes que exceden los límites establecidos.
Es importante destacar que, aunque se registraron 70.000 rechazos, estos no reflejan un número definitivo de personas que quedaron fuera del sistema, ya que algunos trámites fueron suspendidos de forma inmediata cuando se detectó que ya existía un subsidio social previamente aprobado.
¿Qué consecuencias tiene para los jubilados más vulnerables?
El subsidio social tiene como objetivo ayudar a los jubilados de menores recursos, pero muchos de los rechazados se encuentran en una situación límite. De los 7,9 millones de jubilados en Argentina, alrededor del 47% cobra el haber mínimo, lo que indica que muchas personas con pensiones muy bajas podrían quedar fuera de la cobertura de medicamentos.
Aunque PAMI estima que 1,5 millones de jubilados reciben medicación gratuita, no todos los que la necesitan logran acceder al subsidio. Jubilados con ingresos ligeramente superiores a los umbrales establecidos, o aquellos que tienen propiedades adicionales, pero no cuentan con suficientes recursos para costear sus medicamentos, son algunos de los más afectados por este sistema de selección.
Además, el endurecimiento de los requisitos, como la exigencia de antigüedad mínima de vehículos, ha complicado el panorama para los más vulnerables, aunque algunas de estas restricciones fueron flexibilizadas recientemente.
¿Cómo se está adaptando el PAMI ante esta situación?
El PAMI ha reconocido las dificultades y, en respuesta a las críticas, ha implementado algunas modificaciones en el proceso de solicitud. Entre las medidas más destacadas, se incluye la eliminación de la necesidad de presentar una declaración jurada y la extensión de la renovación automática del subsidio, a excepción de los casos con tratamientos específicos.
A pesar de las críticas, desde el organismo insisten en que el sistema es más inclusivo que antes, con acuerdos recientes que permiten a los jubilados acceder a medicamentos a precios más bajos. Sin embargo, persiste la preocupación por los millones de jubilados que aún no logran cubrir sus necesidades de medicación, ya que las cifras indican una disparidad entre los beneficiarios actuales y los que quedarían fuera del sistema.
El subsidio social sigue siendo una herramienta crucial para miles de jubilados en Argentina, pero su implementación ha generado debates sobre la equidad del acceso. Con un 30% de solicitudes rechazadas y una población vulnerable que depende de este tipo de ayudas, las autoridades deberán seguir ajustando las políticas para garantizar que los más necesitados no se queden atrás.