Bulacio, de 34 años, fue capturado en la provincia de La Rioja y, el viernes pasado, se llevó a cabo una audiencia solicitada por la Unidad Fiscal de Homicidios de Concepción, dirigida por Miguel Varela. Durante la audiencia, la auxiliar de fiscal, Luciana Ceccotti, imputó a Bulacio por homicidio agravado, en virtud de la violencia de género, aunque esta calificación podría modificarse a medida que avance la investigación.

La fiscalía presenta evidencias que relacionan a Bulacio con el crimen de Karen. Testigos aseguran haber visto a ambos juntos la noche de su desaparición y confirmaron que se dirigieron a la casa de Bulacio, donde se encontró el cadáver de la joven.

El informe preliminar de la autopsia indica que, aunque el cuerpo presentaba un avanzado estado de descomposición y no mostraba lesiones traumáticas evidentes, se encontraron marcas en un brazo y signos de estrangulamiento en el cuello. Además, se descubrieron restos fetales en el abdomen de la víctima, lo que confirma que estaba embarazada.

La representante del MPF argumentó a favor de la prisión preventiva, citando riesgos de fuga y posible obstrucción de la investigación. Según Ceccotti, "Estamos hablando de un hecho sumamente grave. El acusado no solo acabó con la vida de una persona, sino que ocultó el cuerpo y se dio a la fuga".

El juez a cargo aceptó la solicitud de prisión preventiva por un plazo de 180 días mientras avanza la investigación.

Teoría del caso

Según la acusación, Matías Bulacio tenía una relación de confianza con Karen Rodríguez, ya que ella era sobrina de su pareja. La noche del 9 de diciembre de 2024, Karen salió de su casa en el barrio Primero de Mayo I para reunirse con Bulacio, quien la recogió en su moto. Se dirigieron a la casa de Bulacio en el barrio 53 viviendas. Durante la madrugada del 10 de diciembre, tras una discusión, Karen intentó abandonar el lugar. Bulacio, en un acto de violencia, la sujetó del cuello, causando su asfixia y posterior muerte, y luego enterró su cuerpo en el fondo de la vivienda.