Giro inesperado en el escándalo en Red Bull que mantiene en vilo a la Fórmula 1
Varios medios ingleses reportaron que la empleada anónima que acusó a Christian Horner fue suspendida y tendrá la oportunidad de apelar en los próximos días.
El escándalo que sacude a la Fórmula 1 ha dado un giro inesperado con la suspensión de la empleada anónima que acusó al director del equipo Red Bull, Christian Horner, por "conducta inapropiada". Esta medida llega luego de que Max Verstappen, destacada figura del deporte, expresara su apoyo hacia su padre, Jos Verstappen, en relación con el caso, según informaron medios británicos como The Times, BBC y DailyMail.
La suspensión de la empleada se produce después de que una investigación independiente exonerara a Horner de las acusaciones en su contra. Aunque la empleada tiene la oportunidad de apelar dentro de los próximos cinco días, este desarrollo marca un punto importante en el caso y sugiere la complejidad de las dinámicas internas dentro de Red Bull y sus ramificaciones.
Se ha sugerido que la suspensión pudo haber sido instigada por una solicitud de Geri Halliwell, esposa de Horner, quien habría deseado que su esposo cortara todo contacto con su acusador no identificado, una tarea complicada dado que compartían el mismo entorno laboral.
La investigación que absuelve a Horner no ha sido divulgada al público ni a figuras relevantes de la Fórmula 1, manteniendo un misterio sobre los detalles del caso. Red Bull ha optado por mantener silencio público sobre el tema, mientras Horner continúa negando las acusaciones en todo momento.
Se espera que Christian Horner aborde el tema en una próxima conferencia de prensa de la FIA previa al inicio de las pruebas, donde posiblemente se aborden las nuevas dimensiones de este caso que sigue siendo objeto de atención en el mundo de la Fórmula 1. Aunque es probable que Horner no hable extensamente sobre el tema, es probable que se le hagan preguntas sobre la suspensión y las recientes declaraciones de Max Verstappen en apoyo a su padre.