Karen Rodríguez, de 22 años, fue la octava víctima de femicidio en lo que va del año en Tucumán. El caso sacudió al barrio Cristo Rey, donde vivía la joven, al revelarse un dato desgarrador: estaba embarazada.

El lunes 9 de diciembre, Karen se despidió de su padre, Mario Rodríguez, para salir de su casa en Concepción. Desde entonces, no se supo nada más de ella. El desenlace llegó el sábado, cuando su cuerpo fue hallado en la vivienda de Matías "Toro" Bulacio, quien había sido visto con ella el último día y ahora enfrenta la acusación de femicidio.

El perfil del acusado y la cronología del caso

Según la reconstrucción del fiscal Miguel Varela, Karen mantenía una relación sentimental con Bulacio, quien habría pasado a buscarla el día de su desaparición. Testimonios de vecinos señalan que el acusado no era bien visto en el barrio debido a problemas relacionados con las drogas.

Tras el crimen, Bulacio fue visto pidiendo dinero a su madre para huir a La Rioja, donde finalmente fue capturado en la terminal de ómnibus. Durante su detención, confesó informalmente haber asesinado a Karen bajo los efectos de estupefacientes, aunque esa declaración no tiene validez legal.

Además del femicidio, enfrenta una causa por robo, ya que estaba prófugo desde febrero de este año.

Indignación y pedidos de justicia

La detención de Bulacio ha reavivado la indignación de los vecinos de Concepción. Juana Jiménez, una de las residentes, expresó: "Este caso no puede quedar en el olvido. Espero que los que saben algo hablen ahora".

Por otro lado, Vanesa Tabera, ex pareja del acusado y tía de la víctima, fue liberada tras quedar descartada, por ahora, su participación directa en el crimen. Sin embargo, sigue bajo la lupa por un posible encubrimiento, ya que habría facilitado información clave para localizar a Karen.

El fiscal Varela avanza en el caso, mientras crece la expectativa por la audiencia en la que se formalizarán las acusaciones contra Bulacio.

Una marcha para exigir justicia

Vecinos y familiares de Karen Rodríguez analizan organizar una marcha para exigir justicia y recordar que los femicidios no deben quedar impunes. El caso de Karen, que además cargaba con la ilusión de ser madre, expone una vez más la urgencia de frenar la violencia de género que sigue dejando víctimas en Tucumán y en todo el país.