Imputaron por desobediencia judicial al hombre que acosó por 12 años a una joven

 La situación de Florencia Andretta, una joven tucumana que ha padecido el acoso de Federico Punturo durante 12 años, ha vuelto a ser noticia tras la reciente formulación de cargos contra el imputado por desobediencia judicial.

La abogada Patricia Neme explicó que el acusado había violado una orden de restricción emitida el 22 de octubre, que le prohibía acercarse a la víctima. "Apenas cuatro días después de ser notificado de esta medida, incumplió y se acercó a su domicilio", indicó la abogada, resaltando la gravedad de la situación.

La fiscalía solicitó la prisión preventiva del imputado por 45 días, un pedido al que Neme se adhirió. Sin embargo, la jueza no otorgó esta medida, optando en su lugar por una evaluación psiquiátrica en el hospital Juan M. Obarrio y, si no hubiera indicaciones para su internación, quedará bajo arresto domiciliario de solo 15 días.

Estamos desilusionados con esta decisión, especialmente considerando los antecedentes de Punturo.

Críticas a la Falta de Perspectiva de Género

Neme expresó su preocupación por la falta de perspectiva de género en la resolución del caso. "Es inaceptable que, con la historia de acoso que tiene este individuo, la jueza no considere la urgencia de proteger a la víctima", dijo. A pesar de que un informe psiquiátrico concluyó en que Punturo comprende la criminalidad de sus actos, la decisión de la jueza no acompaña la necesidad de garantizar la seguridad de Florencia.

La abogada mencionó el caso de Paola Tacacho, referente en la lucha contra la violencia de género en la provincia, para ilustrar cómo la justicia aún falla en responder adecuadamente a situaciones de acoso prolongado. "Es alarmante que la justicia no actúe con firmeza en casos tan graves", sentenció.

Expectativas Futuras y Recursos Legales

La abogada ya ha impugnado la sentencia y está a la espera de novedades sobre el informe psiquiátrico que determinará si Punturo permanecerá internado o volverá a su domicilio con arresto domiciliario. 

Esta medida es una burla para nuestra cliente, que ha soportado años de acoso.

El compromiso de la fiscalía en este caso ha sido fundamental, según Neme. La rápida actuación ha permitido que se tomen medidas más estrictas, aunque la defensa de la víctima sigue en pie, esperando que la justicia reconozca la seriedad del acoso y la violencia de género. "Lo que necesitamos es que se escuche a las víctimas y se actúe en consecuencia", concluyó la abogada.


Leer también: Detuvieron al hombre que acosó a una joven tucumana por 12 años