Este jueves se desarrolla la décima jornada del juicio por la muerte de Diego Armando Maradona, justo con el número que lo inmortalizó. En esta instancia, declararán cinco médicos del sanatorio IPENSA de La Plata, quienes detectaron un hematoma subdural en el cerebro del exfutbolista tan solo tres semanas antes de su fallecimiento. Su testimonio será central para comprender el estado clínico de Maradona previo a su cirugía y la posterior "internación domiciliaria" que está bajo la lupa judicial.

La operación y la internación bajo sospecha

Tras la detección del hematoma, Maradona fue operado en la Clínica Olivos. La cirugía fue considerada exitosa y recibió el alta hospitalaria para continuar la recuperación en una casa en Tigre. Sin embargo, la Fiscalía busca probar que esa vivienda no estaba equipada para un seguimiento médico adecuado: no había equipos, ni personal suficiente ni una ambulancia disponible. Ya varios testigos, incluidos familiares y vecinos, coincidieron en ese punto.

Luque y Cosachov, en el centro de las acusaciones

Entre los siete imputados, el neurocirujano Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov son los más mencionados. Luque, quien era el médico de cabecera, fue señalado como el principal responsable de la salud de Diego. Sin embargo, el testimonio de Verónica Ojeda puso en duda incluso su participación directa en la cirugía. "Nos mintieron a todos, se nos rieron en la cara. Una vergüenza", dijo.

Cosachov, por su parte, fue criticada por su rol el día de la muerte: la Fiscalía sostiene que no realizó maniobras de RCP. Su defensa afirma lo contrario. El psicólogo Carlos Díaz también está imputado, y se lo acusa de haber restringido las visitas familiares en los últimos días de vida del ídolo.