La Justicia tiene en la mira a las fiestas electrónicas
Tras detener a dos jóvenes por venta de drogas en una fiesta el sábado pasado, la Justicia busca seguir el recorrido de estos eventos. ¿La policía colaboró a los sospechosos?
La pesquisa sobre la venta de drogas sintéticas en las fiestas electrónicas de la provincia avanza. A pesar de que el fiscal de Narcomenudeo, José Sanjuán, logró procesar a dos jóvenes, considera que aún está en las primeras etapas de la investigación, sin saber hasta dónde llegará.
El domingo por la mañana, el personal de Drogas Peligrosas de la Policía Federal intervino en un after en una finca de Tafí Viejo. Durante el operativo, confiscaron éxtasis, LSD-25, ketamina, marihuana, cocaína y tusi (cocaína rosa). Como resultado, se solicitó la detención de César Fernández Fazio (30 años) y Mariano Valdez (31), quienes fueron procesados por comercio de estupefacientes. El juez Guido Buldurini ordenó su prisión preventiva por tres meses.
Los sospechosos
Fernández Fazio fue el primer sospechoso. Este joven, quien ya había enfrentado un proceso por cultivo de marihuana sin autorización en la Justicia Federal, era conocido en el ámbito de la música electrónica. Era la cara visible de las fiestas legales y de los afters, lo conocían como "el del Peugot", ya que realizaba las transacciones a bordo de ese auto.
Como técnico en Seguridad e Higiene, formaba parte de Met Producciones, una empresa organizadora de fiestas electrónicas en varios lugares de la provincia, especialmente en San Miguel de Tucumán.
"Unimos personas a través de la música", era uno de los lemas de la firma. Sin embargo, en la investigación se comprobó que también organizaban afters, es decir, reuniones que no contaban con ningún tipo de autorización en lugares alejados.
Valdez era otro engranaje en la organización. Él habría sido responsable de la organización y por supuesto, la venta de sustancias. Fue el que le entregó tres veces éxtasis al agente revelador, una de ellas, por pedido de su supuesto jefe.
Durante la audiencia el representante del Ministerio Público, que fue dirigido por el fiscal Sanjuán, destacó dos puntos claves. El primero, que la productora contaba con otras personas que se encargaban de las relaciones públicas, por lo que no descartan que haya más involucrados en la comercialización de sustancias.
La policía en duda
Una causa que tiene la novedad de haberse utilizado la figura de agente revelador. Un expediente donde aparece que la banda contaba con apoyo policial para desarrollar su actividad. Dejó además al descubierto parte de la operación que realizan estas organizaciones en estos encuentros.
"Vamos a solicitar que, ante los indicios que se han recolectado en el marco de esta causa, ordene que se abra una investigación para confirmar que efectivos de la Policía podrían haber brindado algún tipo de colaboración con los sospechosos", aseguró el auxiliar Carlos Berarducci durante uno de los momentos más tensos de la audiencia por el caso de la venta de éxtasis.