La ONG tucumana que lucha por facilitar el acceso al cannabis medicinal
En Tucumán, existe Yungannabis, la primera fundación dedicada al cannabis medicinal.
Foto: Felipe Herrera, Paula Bongiorni y Paula Locascio, fundadores de Yungannabis.
¿Y qué pensas cuando hablamos de cannabis? ¿Sustancia legal o ilegal? A diferencia de lo que muchos creen, cuando hablamos de cannabis (o marihuana), no hablamos de algo nocivo y perjudicial, sino de una sustancia que beneficia, a nivel salud, a miles de personas en todo el mundo.
Con ese objetivo, el de brindar alternativas naturales, eficaces y sin efectos secundarios, surge Yungannabis, la primera fundación del país dedicada a facilitar el acceso, la investigación, difusión y educación respecto al cannabis.
Felipe Herrera es uno de los tres fundadores de Yungannabis. Además de ello, también es un paciente más de esta ONG. Hace diez años, tuvo un accidente automovilístico y eso dejó algunas secuelas en su columna. A pesar de sus varios intentos para encontrar un tratamiento que efectivamente mejore su bienestar, no pudo dar con lo que buscaba.
"Los analgésicos que tomaba siempre me impactaban en el estómago o en otra parte del cuerpo. En algún momento, también pasó a ser la cabeza porque algunos de los analgésicos y de los tratamientos son neuromoduladores e influyen en las neuronas. Eso me gustaba menos porque siempre estaba muy activo y necesitaba estar conectado", relata Felipe.
Así que luego de probar otros caminos, llegó al cannabis medicinal: "Lo conozco hace ya tiempo porque cultivo hace muchísimos años. Me metí en esta terapia y encontré la solución", asegura. Con el tiempo, Felipe ayudó a mucha gente y se replanteó la necesidad de cambiar lo que hacía en el día a día.
En 2015, junto a un staff de médicos, nace Curativa. Lamentablemente, con la llegada de la pandemia, esta ONG que se había formado se deshizo. Aún así, el deseo de seguir laburando e investigando el cannabis estaba intacto, lo que propulsó que en 2020 surgiera Yungannabis, que actualmente cuenta con un equipo de 15 personas.
"Somos la primera fundación de Argentina constituida legalmente inscripta en todos los organismos. Además, estamos en Tucumán, el mismo lugar donde se declaró la Independencia, así que son buenas señales", detalla orgulloso Herrera.
"Había una responsabilidad fuerte y, tanto el Estado como otros organismos, no la estaban tomando. Fue un deber cívico de las personas que estábamos involucradas poder hacer algo mejor por la gente".
ACCESO, INVESTIGACIÓN, EDUCACIÓN Y DIFUSIÓN
Felipe explica que en Yungannabis trabajan bajo cuatro pilares fundamentales: uno de los más importantes es el acceso a la terapia. "Hasta hace no mucho tiempo, en Argentina, las personas podían comprar cannabis de forma ilegal, en realidad, todavía se consigue en cualquier lado. Te pueden vender aceite de cannabis, pero que carece de cualquier tipo de rigor científico. Entonces, podemos comprar cualquier cosa pero sin saber que estamos tomando".
Según relata Felipe, en la Fundación se promueve la terapia de acceso seguro. Es decir, que una persona se acerque y con seguridad científica obtenga un fito preparado que está analizado. "Saber que estás usando algo de buena calidad y, además de eso, saber qué es lo que necesitás específicamente del cannabis", puntualiza.
Los otros pilares son la Investigación, Educación y Difusión, que van de la mano. Lo que caracteriza a esta Fundación es su participación en congresos, talleres y capacitaciones. También cuentan con convenios con la Facultad de Agronomía y la Facultad de Bioquímica que promueven la investigación científica del cannabis. Sumado a esto, en la provincia ya se venía trabajando la cuestión cannábica mediante las Jornadas de Cannabis Medicinal y Sociedad realizadas en la Facultad de Psicología.
TUCUMÁN TIERRA CANNÁBICA
Herrera explica que la marihuana es una planta muy diversa y versátil que proviene del Himalaya y que Tucumán posee un clima propicio para su cultivo de cannabis. "Tenemos un suelo muy bueno y el clima permite un montón de oportunidades. Además, la gran humedad y las altas temperaturas, por un lado, pueden favorecer en el momento del cultivo, pero después, en la cosecha, pueden traer algunos problemas".
Esta planta puede aguantar temperaturas desde los dos grados bajo cero hasta 45° o 50°; entonces, es cultivable en infinidades de regiones del planeta. Aún así, hay que saber ver las oportunidades para su cultivo y luego, afrontar los desafíos de cosecha, tratamiento, curado y secado de la flor.
En Tafí del Valle, se encuentra una de las producciones de cannabis más grandes de la provincia, de la mano de Inkillay, donde se cultiva la planta a 800 metros sobre el nivel del mar. Tafí del Valle se distingue por su clima templado de montaña con veranos suaves y frescos y un suelo fértil.
REGLAMENTACIÓN DE LA LEY DE CANNABIS MEDICINAL
Un poco de historia. En Argentina, desde inicio de los 80 se viene pidiendo por una ley que contemple al cannabis medicinal. En los últimos años, se llevó a cabo la Marcha Mundial de la Marihuana, que entre otras cosas, pide por una Reglamentación Integral del Cannabis.
El 15 de julio de 2021, el Senado dio media sanción con modificaciones al proyecto de ley. Finalmente, el 5 de mayo de 2022, la Cámara de Diputados, en sesión especial, sancionó el proyecto y el 23 de mayo de 2022, la Ley fue promulgada por el Poder Ejecutivo, a través del Decreto N°266/2022. Finalmente, el 26 de mayo de 2022, el Decreto N°266/2022 y la Ley fueron publicados en el Boletín Oficial.
El pasado lunes, se aprobó una nueva reglamentación mucho más amplia que va a permitir desarrollar otras actividades más complejas de lo que hace una ONG. Además, permite profesionalizar y profundizar mucho más los conocimientos de análisis y calidad sobre la planta. "Son un montón de cuestiones que hacen que la industria se desarrolle mejor. Los productos van a ser mejores, más profesionales", analiza Felipe.
"La reglamentación permite que las normas estén claras. Así, es mucho más fácil para los inversores confiar. Además, es espectacular para los pacientes y para la economía del país, ya que hay más o menos una generación de 10.000 puestos de trabajo", comenta Felipe.
Gracias a esto, también se autoriza el uso del cannabis medicinal, veterinario, industrial y nutricional. Esto último significa que dentro de unos meses, posiblemente veamos en las góndolas de supermercados yerba mate con cannabis o por qué no, en el dulce de leche.
A pesar de esta nueva reglamentación, el experto en cannabis sostiene que esta todavía es imperfecta, pero que significa un gran avance, tanto para sus productores como para sus consumidores. Solo resta seguir luchando por modificaciones que mejoren la misma y también, para que los mitos que ponen a la marihuana como una droga perjudicial sean erradicados.