Las exportaciones de carne argentina baten récord histórico, pero el consumo interno sigue a la baja
Las exportaciones de carne vacuna alcanzaron su mayor volumen en 57 años, superando las 699.000 toneladas y generando más de 2.000 millones de dólares. Sin embargo, el consumo interno sigue cayendo, con una disminución del 11% en comparación con el año pasado
Entre enero y septiembre de 2024, las exportaciones de carne vacuna argentina registraron un impresionante volumen de 699.987 toneladas, lo que generó ingresos por u$s 2.122 millones. Este es el nivel más alto en 57 años, según los datos difundidos por la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca.
Los mercados internacionales siguen siendo clave para la industria. Entre los destinos más importantes, destacaron los aumentos en las ventas a Estados Unidos (+46%), Chile (+21%) e Israel (+11%). También se observó un crecimiento en las exportaciones hacia la Unión Europea (+7%) y China (+4%). Por otro lado, México irrumpió como un nuevo mercado relevante, ubicándose en el sexto lugar en el ranking de países importadores de carne argentina.
La caída en el consumo interno de carne
A pesar del fuerte crecimiento de las exportaciones, el consumo interno de carne vacuna está en declive. Según los datos de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (Ciccra), entre enero y septiembre de 2024, el consumo aparente cayó un 11,3%, lo que equivale a una reducción de 209.800 toneladas. Con 1,646 millones de toneladas consumidas en lo que va del año, este es el nivel más bajo de consumo en los últimos 26 años.
El consumo per cápita también experimentó una disminución significativa, pasando de 53,3 kilos en 2023 a 46,8 kilos por persona, lo que representa una caída del 12,3% respecto al mismo período del año anterior. Esto marca una tendencia preocupante para la industria cárnica argentina, que enfrenta un panorama de mayor demanda externa pero menos consumo interno.
Precios de la carne: moderada suba
En cuanto a los precios, aunque los aumentos no son tan pronunciados como en años anteriores, siguen siendo una preocupación. En septiembre, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) en el Gran Buenos Aires mostró una suba mensual de 3,7%, con una variación interanual del 214%. En el rubro de alimentos y bebidas no alcohólicas, el aumento fue del 2,2%. La carne, por su parte, experimentó una suba del 3,1% en el mes, aunque los principales cortes vacunos apenas incrementaron su precio en un 1%. Por otro lado, los precios de productos como el pollo entero y las hamburguesas congeladas mostraron un aumento más pronunciado, de hasta un 7,5%.