La madre del primer bebé fallecido en el Hospital Materno Neonatal de Córdoba, Vanessa Cáceres, ofreció un testimonio desgarrador durante el juicio por las muertes de cinco bebés y el intento de homicidio de otros ocho. 

Vanessa narró que su tercer hijo, Francisco, murió el 18 de marzo de 2022, un día que describió como uno de los peores de su vida. "Le reventaron el corazón", declaró entre lágrimas, refiriéndose a los daños cardiacos que sufrió su hijo. Aseguró que los médicos le ofrecieron una autopsia antes de que Francisco muriera, pero ella solo quería que lo salvaran.

Vanessa describió cómo, tras dar a luz, fue separada de su hijo por la supuesta necesidad de llevarlo a terapia por una arritmia. "Se va a ir igual", le dijo una doctora, palabras que la dejaron en shock. La madre también compartió el dolor de pasar dos noches en el hospital, donde la cuna vacía de su hijo era un recordatorio constante de su pérdida.

La Búsqueda de Justicia

Posteriormente, Vanessa y otros padres se encontraron con el ex gobernador Juan Schiaretti, pero la comunicación cesó tras ese encuentro, dejándolos solos en su lucha. "Si nosotros no hubiéramos puesto el cuerpo como lo pusimos, nada de esto (por el juicio) hubiera sucedido", afirmó. Pidió al jurado no olvidar la humanidad en este caso, criticando la falta de compasión y transparencia por parte de los imputados, quienes, según ella, creyeron que "esto nunca iba a salir a luz".

Testimonios de Otros Padres

El testimonio de Yoselín Rojas, madre de Angeline, una de las bebés fallecidas, también fue crucial. Yoselín, inmigrante peruana, describió cómo su hija nació sana en el mismo hospital el 6 de junio de 2022, pero murió poco después por una sobredosis de potasio. Reconoció a Brenda Agüero, la enfermera acusada, como la persona que se llevó a su hija después del parto. Su esposo, Jaime Cornelio Pérez, confirmó haber visto a Agüero pellizcar a la bebé mientras él la sostenía.