Misiones: la protesta se extenderá durante el fin de semana

Las esperanzas de alcanzar un acuerdo entre el Gobierno y la Policía de Misiones se desvanecieron hoy, dejando a ambas partes en un punto muerto en medio de una creciente crisis. 

A pesar de las expectativas generadas por una posible contrapropuesta por parte de los uniformados, el ministro coordinador, Héctor Llera, negó rotundamente la posibilidad de un nuevo encuentro para discutir las demandas.

En un anuncio previo al mediodía, los voceros de la Policía, Ramón Amarilla y Germán Palacios, anticiparon una reunión con otros representantes de la fuerza. Sin embargo, estas expectativas se desvanecieron cuando Llera afirmó en declaraciones a Infobae que no estaba prevista ninguna nueva instancia de diálogo con los policías, que ya llevan siete días de protesta.

"Ellos tienen el acta para firmar. No recibiremos una contrapropuesta", sentenció Llera, poniendo fin a las especulaciones sobre una posible negociación adicional.

A pesar de esto, Amarilla reapareció en el Comando Radioeléctrico, epicentro del conflicto, manifestando que estaban a la espera de ser convocados para una nueva reunión. Junto a él se sumó el comisario Mario Gentile, conocido como "G", quien actúa como nexo entre los negociadores de la Policía y las autoridades gubernamentales.

El tema central de las discusiones gira en torno al aumento salarial para los agentes de policía. Se exploran diversas alternativas, incluida la posibilidad de concentrar el incremento en los escalones más bajos de la pirámide salarial. Esta iniciativa surgió ante el agotamiento del campamento de protesta, afectado por el frío y la lluvia, lo que ha contribuido a calmar los ánimos y las expectativas.

"Hace unos días, era 100% de incremento o nada. Ahora tenemos que dar un margen para tratar de destrabar esto y regresar a la calle. No nos olvidemos: somos policías", reflexionó Amarilla.

Aunque el Gobierno mantuvo un mutismo desde la media tarde, los manifestantes persisten en sus reclamos, realizando ocasionalmente un "sirenazo" fuera del Comando. La paciencia de quienes acamparon desde el viernes se desgasta al no recibir una respuesta oficial a una contrapropuesta sobre la última oferta gubernamental, que fue del 30%.