En un incidente alarmante que recuerda a otros hechos de violencia reciente, un joven de 29 años fue agredido por tres vecinos en Recoleta, Buenos Aires, después de solicitar que bajaran el volumen de la música en el Salón de Usos Múltiples (SUM) de su edificio. El ataque se produjo en la noche de Navidad, específicamente en Mansilla al 3400, y dejó al joven con un ojo morado y múltiples hematomas.

La víctima, identificada como Lucas F., relató que, tras un día fuera de casa, regresó y encontró el ambiente en su edificio ruidoso. A pesar de que inicialmente decidió no intervenir, la situación se tornó insostenible. "Desde la planta baja ya se escuchaba la música a todo volumen", explicó Lucas. Cuando salió a pasear a su perra, se cruzó con los tres atacantes en el ascensor. "Les pedí que bajaran un poco la música, pero la mujer me respondió que era un amargado", recordó.

El intercambio verbal rápidamente se transformó en agresión física. "Cuando me di vuelta, uno me pegó en la oreja y reaccioné", contó Lucas. A pesar de estar solo frente a tres agresores, intentó defenderse, pero rápidamente fue superado en número y terminó en el suelo, sufriendo graves lesiones.

La violenta escena fue captada por una cámara de seguridad, donde se puede observar cómo se desarrolla la pelea. Dos policías que se encontraban en la zona intervinieron y lograron detener la golpiza. A pesar del brutal ataque, Lucas rechazó la asistencia médica del SAME y decidió no presentar una denuncia, aunque la fiscalía de turno abrió un expediente de oficio contra los agresores.

Este hecho resuena en la comunidad, especialmente tras el reciente asesinato en Lomas del Mirador, donde un conflicto similar terminó en tragedia. La violencia por disputas vecinales plantea una preocupación creciente en la sociedad. Las autoridades continúan investigando el caso, buscando prevenir futuros incidentes de esta naturaleza.