En la madrugada, alrededor de las 2:30, la familia de Ángel Di María fue amenazada en el country donde viven, habrían invadido uno de los accesos exclusivos al barrio privado "miraflores" cerca de Rosario. 

Los atacantes estaban en un auto gris del cual se escucharon explosiones hacia la familia del jugador. El hecho comenzó con una bolsa de nailon negra con el apellido "Di María" que fue arrojada a la puerta de su casa. 

Luego de esto, los sospechosos se fugaron e inmediatamente la familia entregó el paquete a las autoridades policiales presentes. Si bien, el hecho no presentó elementos balísticos en el lugar, quedaron bajo custodia y cuidados extremos. 

El cartel no incluyó intimidaciones ni peligros extremos para las víctimas pero si fue peligroso el modo de ingreso de estos supuestos atacantes. La polícia de Funes investiga el hecho y no quisieron dar declaraciones sobre el contenido del mismo, además, la fiscalía de Rosario  tomó cartas en el asunto.