VIDEO: un enfermero está detenido por robar fentanilo del hospital de La Matanza
El sospechoso, arrestado por la Policía Bonaerense, fue observado por las cámaras de seguridad.
En un nuevo episodio relacionado con el robo de medicamentos controlados, un enfermero de 45 años fue detenido por robar varias ampollas de fentanilo en el Hospital Paroissien, ubicado en la localidad de Isidro Casanova, en el partido de La Matanza. Walter Hugo Mansilla, que también trabajaba como ambulanciero, fue arrestado tras un allanamiento en su hogar, donde encontraron tres ampollas del potente anestésico.
La denuncia surgió cuando una empleada del hospital alertó sobre la desaparición de las ampollas, un medicamento altamente controlado que se utiliza exclusivamente en el ámbito hospitalario. Tras revisar las cámaras de seguridad, se identificó al sospechoso, quien aparece en las grabaciones sustrayendo las dosis de fentanilo mientras portaba un ambo verde.
La secuencia de los hechos según las cámaras de seguridad
El robo fue registrado en múltiples cámaras de seguridad del hospital. En las imágenes se puede ver al enfermero con las manos en los bolsillos minutos después de ingresar al hospital, y poco tiempo después, saliendo del centro de salud y subiendo a su auto personal. La investigación, llevada a cabo por la Policía Bonaerense, reveló que Mansilla había llegado al hospital días antes en una ambulancia privada.
El allanamiento en su domicilio permitió la incautación de más medicamentos, además de las ampollas robadas, lo que profundizó el caso. La fiscal Evangelina Sánchez, a cargo de la causa, calificó el delito como hurto agravado, aunque el enfermero fue liberado bajo fianza mientras continúa el proceso judicial.
Fentanilo: un opioide peligroso y de uso estrictamente hospitalario
El fentanilo es un opioide sintético que se utiliza para tratar el dolor intenso en entornos hospitalarios. Es entre 50 y 100 veces más potente que la morfina, lo que lo convierte en un medicamento extremadamente controlado. En los últimos años, su uso indebido ha causado una creciente preocupación debido a las muertes por sobredosis, especialmente en países como Estados Unidos, donde la crisis de los opioides es un grave problema de salud pública.