Este lunes, Japón vivió momentos de tensión luego de un terremoto de magnitud 6,9 que sacudió la región suroeste del país. La Agencia Meteorológica nipona lanzó una alerta de tsunami para algunas zonas del sur, especialmente en la isla de Kyushu, donde ocurrió el epicentro del temblor.

El sismo y la alerta de tsunami en la región de Kyushu

El terremoto se registró alrededor de las 21:19 hora local, con epicentro en la prefectura de Miyazaki, en la isla Kyushu. Poco después, la agencia emitió una alerta de tsunami, previniendo olas de hasta 1 metro de altura. Afortunadamente, no se reportaron daños inmediatos en la zona, aunque las autoridades pidieron la evacuación preventiva de los residentes en la ciudad costera de Kochi.

A tan solo media hora del sismo, las aguas del puerto de Miyazaki subieron 20 centímetros, según informes de NHK, lo que confirmaba la llegada de un tsunami moderado. Las autoridades mantuvieron la alerta activa por precaución.

Japón en el Cinturón de Fuego: Vulnerable a los sismos

Este evento sísmico es otro recordatorio de la ubicación de Japón en el denominado "Cinturón de Fuego del Pacífico", una zona altamente propensa a terremotos y actividad volcánica. A pesar de la magnitud del temblor, las imágenes mostraron que el tráfico en las calles seguía funcionando normalmente, sin cortes de electricidad ni daños a las instalaciones nucleares cercanas.

Mientras tanto, el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) ajustó a la baja la magnitud inicial del sismo y descartó cualquier amenaza adicional de tsunami. No obstante, la agencia meteorológica de Japón insistió en la precaución, advirtiendo que los tsunamis pueden ser impredecibles y repetirse.

Recomendaciones a la población japonesa

La agencia de meteorología japonesa recomendó a la población mantenerse alejada de la costa y evitar entrar al mar, dado que los tsunamis pueden continuar golpeando la región. La alerta sigue activa, y las autoridades permanecen vigilantes ante cualquier cambio en las condiciones del mar.