El final de la segunda parte de Arcane, la serie inspirada en League of Legends, ha generado diversas reacciones, pero una de las controversias más notorias es la censura de una escena clave en China. En esta, Vi y Caitlyn tienen un momento de cercanía con miradas cómplices y un leve contacto físico. Sin embargo, para la versión china, estas muestras de afecto fueron eliminadas completamente.

La censura eliminó las tomas que mostraban a las dos protagonistas juntas, lo que resultó en una edición algo extraña y desarticulada, alterando el contexto emocional de la escena. Este cambio, probablemente motivado por las estrictas regulaciones de contenido en China respecto a relaciones emocionales entre personas del mismo sexo, generó polémica, ya que esta modificación modificó significativamente la interacción entre los personajes, que en la serie original refuerzan una conexión afectiva clave para el desarrollo de la historia.

El suceso resalta las diferencias en la recepción de contenido entre diferentes partes del mundo y cómo las normativas culturales pueden afectar la narrativa de una obra, incluso en plataformas de streaming como Netflix.