Argentina negocia un salvoconducto para evacuar a asilados de la embajada en Caracas

La residencia oficial de la Argentina en Caracas vive horas de máxima tensión tras el anuncio de Nicolás Maduro de retirar a la embajadora Stella Lugo de Buenos Aires y expulsar al personal diplomático argentino en Venezuela. 

A medida que patrulleros de la policía local rodearon el edificio, la administración de Javier Milei se enfrenta al desafío de asegurar la salida segura de seis asesores de María Corina Machado, quienes se encuentran asilados en la embajada desde abril.

El gobierno argentino está negociando dos vías para resolver la situación. La primera opción es activar la Convención de Caracas sobre asilo diplomático, que permitiría a un país miembro de la Organización de Estados Americanos (OEA) recibir a los asilados. Brasil se perfila como el candidato ideal para asegurar la protección de los opositores venezolanos, aunque las negociaciones con Itamaraty están complicadas por la posición de Brasil respecto al reconocimiento de los resultados electorales de Venezuela.

Como segunda alternativa, la Argentina presiona para obtener un salvoconducto del gobierno venezolano que permita a los asesores salir del país sin riesgo de detención. 

Las negociaciones bilaterales fueron infructuosas hasta ahora debido a las exigencias del chavismo, pero se espera que la Unión Europea y el Consejo Europeo se pronuncien pronto para exigir garantías para los asilados.

Diana Mondino, ministra de Relaciones Exteriores, subrayó la urgencia de la situación: "Si se quedan sin protección sería una afrenta a nuestro país y no se respetaría ninguna de las normas internacionales. No creo que lleguen a eso". Además, se busca el apoyo del Comité de Relaciones Exteriores del Senado de EE.UU. para presionar por un salvoconducto.