Una adolescente de 15 años fue abusada y asesinada después de asistir a una fiesta en la localidad de Sete Lagoas en Brasil. El brutal crimen ocurrió durante los últimos días del mes de noviembre. Un hombre que paseaba a su perro encontró su cuerpo al día siguiente al borde de una ruta: estaba semidesnuda, tenía un corte profundo en el cuello y le habían pasado encima con un auto.

La víctima, identificada como Sophia Louise Gonçalves Rodrigues Guerra, estaba desaparecida, salió de su casa días previos al crimen sin el consentimiento de su mamá para asistir a una fiesta. La travesura de la adolescente terminó en una terrible tragedia. Testigos la vieron luego junto a dos hombres, quienes fueron detenidos y uno de ellos confesó el crimen.

Cómo fue el crimen de Sophia

El vecino que encontró el cuerpo de la joven declaró haber llamado de inmediato a la policía y a una ambulancia, que confirmó la muerte de la adolescente. La joven tenía marcas de neumáticos en el cuerpo y los investigadores recogieron dos trozos de plástico plateado, que aparentemente pertenecerían a un paragolpes.

Luego de entrevistar a varios testigos que estuvieron en la fiesta, la policía descubrió que Sophia se fue del lugar con dos hombres en un auto Honda Civic plateado: Ulisses Roger Pereira Cruz, de 24 años, y Gabriel Carvalho Medeiros, de 21.

La policía acudió a la casa de Ulisses Roger Pereira Cruz y encontró el auto con el paragolpes dañado. Este sospechoso fue detenido y dijo que chocó el vehículo la noche anterior, pero no brinó más detalles de cómo ocurrieron los hechos. 

Además, al ser consultado por la joven, se mostró nervioso y afirmó que, después de la fiesta, fue a un bar con Gabriel y dejó a la víctima en una plaza del centro de la ciudad.

Sin embargo, la policía continuó con el interrogatorio, y el hombre cambió varias veces su versión hasta finalmente afirmar que ambos violaron y mataron a la joven.

El otro sospechoso, Gabriel Carvalho Medeiros, declaró que es inocente y que su amigo lo llevó a su casa y se fue solo con Sophia en el auto. Una cámara de seguridad de una casa vecina grabó el momento. En las imágenes, se puede ver a la joven en el asiento del copiloto cuando el auto arranca.

El asesino intentó encubrir el crimen

Más adelante, Ulisses volvió a cambiar su versión, y afirmó que mató solo a la joven con una navaja, pero negó haberla violado. También dijo que atropelló su cuerpo para simular un accidente y escribió en el suelo las siglas CBC, en referencia a una facción criminal denominada Comando do Bairro do Carmo, para tratar de encubrir el crimen y vincular a la víctima con el narcotráfico.

La policía incautó un cuchillo que habría sido utilizado para cometer el crimen, según declaró el sospechoso. 

El caso es investigado por la Policía Civil de Minas Gerais (PCMG). La comisaria Fernanda María de Assis Costa indicó que según los resultados preliminares de la autopsia, la causa de la muerte fue el corte en el cuello de la víctima.

"La adolescente parecía tener un corte muy grande en el cuello, por lo que imaginamos que la causa de la muerte se debió a este corte", indicó al medio local g1.

Bruno Cavalcante, abogado de Gabriel Carvalho Medeiros, afirmó que los únicos indicios que apuntaban a que su cliente era responsable del asesinato eran las "afirmaciones contradictorias del otro sospechoso".

Por último, Cavalcante agregó: "La defensa ya reunió pruebas en el procedimiento investigativo que acreditan el momento en que Gabriel es dejado en casa por Ulisses junto con la víctima, aun con vida, lo que demuestra que Gabriel no tiene nada que ver con el presunto delito de homicidio".