Las imágenes de Bahía Blanca bajo el agua son desgarradoras: autos flotando en calles convertidas en ríos, hospitales inundados y bebés siendo evacuados de urgencia. Pero detrás de esta tragedia hay dos factores meteorológicos clave que explican por qué la ciudad bonaerense fue el epicentro de un temporal histórico.

Un frente frío que no se movió

Según Cindy Fernández, meteoróloga del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), el temporal en Bahía Blanca se desató por la combinación de dos condiciones extremas. Por un lado, una masa de aire cargada de humedad se estacionó sobre la región, y por otro, un frente frío que no avanzó, generando lluvias torrenciales en un corto período de tiempo.

"En la zona de Bahía Blanca, el frente frío se mantuvo prácticamente estático, sin moverse. Esto hizo que se regeneraran constantemente tormentas en un ambiente ya muy húmedo", explicó Fernández. El resultado fue una lluvia récord: más de 300 milímetros cayeron en apenas cinco horas, algo inédito para la región.

¿Por qué no llueve igual en CABA y GBA?

Aunque el AMBA también está afectado por la misma masa de aire húmedo, la falta de un frente frío estacionado evita que se repita el mismo escenario. "En la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires no tenemos ese frente frío quieto, por eso las lluvias no son tan intensas", aclaró Fernández.

Sin embargo, la meteoróloga advirtió que el cambio climático está generando veranos más cálidos y húmedos, lo que podría aumentar la frecuencia de estos fenómenos extremos en el futuro.

Un desastre que no fue solo meteorológico

Más allá de las condiciones climáticas, la infraestructura de Bahía Blanca también jugó un papel crucial en la magnitud del desastre. El desborde del canal Maldonado y del arroyo Napostá agravó la situación, dejando gran parte de la ciudad bajo el agua.

Las autoridades locales confirmaron al menos seis muertes y más de 60 familias evacuadas. Para asistir a los afectados, se desplegaron efectivos del Ejército, la Armada Argentina, Prefectura Naval y Defensa Civil, además de vehículos anfibios para rescates en zonas inundadas.

¿Fue el cambio climático el responsable?

José Luis Stella, también del SMN, aclaró que no se puede atribuir directamente este evento al cambio climático. "No es tan lineal. Necesitaríamos más estudios para determinar si estos fenómenos extremos serán más frecuentes en el futuro", señaló.

Sin embargo, Stella reconoció que los veranos cada vez más cálidos y húmedos en Argentina podrían favorecer la formación de tormentas severas como la de Bahía Blanca.

El pronóstico para los próximos días

El alerta amarilla se mantuvo en Bahía Blanca durante el viernes, aunque las lluvias disminuyeron hacia el mediodía. Para el sábado, se esperan chaparrones aislados, mientras que el domingo llegará el sol, con temperaturas entre 10°C y 20°C.

Mientras tanto, la ciudad intenta recuperarse de una de las peores inundaciones de su historia, con la esperanza de que la ayuda llegue a tiempo para quienes lo perdieron todo.