Patricia Bullrich, ministra de Seguridad de la Nación, dio detalles sobre los violentos enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad en las inmediaciones del Congreso, asegurando que los grupos que se convocaron para el evento estaban "preparados para matar". Bullrich destacó la gravedad de la situación, señalando que al menos 17 policías resultaron heridos y que más de 100 personas fueron detenidas. Sin embargo, un comunicado posterior de la cartera de Seguridad corrigió la cifra a 124 arrestos.

Previsión y violencia organizada

En una entrevista con Luis Majul en LN+, Bullrich describió los hechos como un ataque coordinado por parte de barras bravas y agrupaciones de izquierda, que, según ella, tenían como objetivo desestabilizar al Gobierno. "Vinieron preparados para matar", afirmó la ministra, quien detalló que durante el operativo se secuestraron armas de fuego, cuchillos y otros objetos como miguelitos (clavos para pinchar ruedas), los cuales confirmaron que los desmanes habían sido premeditados.

La ministra también detalló que los manifestantes contaban con documentos que indicaban cómo debían repeler a la policía con botellas y piedras, lo que refleja una clara organización detrás de las protestas. "Teníamos todos los papeles que decían cómo se iban a organizar", añadió.

Reacciones ante la violencia y nuevas medidas

Además de los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, Bullrich mencionó que los ataques no se limitaron al Congreso, sino que se extendieron a las calles cercanas, donde grupos violentos incendiaron vehículos de la policía y causaron numerosos daños. A pesar de la intensidad de los disturbios, la funcionaria destacó que, afortunadamente, ninguno de los policías heridos sufrió lesiones de gravedad.

En respuesta a los hechos, Bullrich anunció que se tomarían acciones legales contra los responsables de los desmanes, enfatizando que las demandas se basarán en figuras penales como los ataques a la policía, daños a la propiedad y violencia extrema. La ministra también adelantó que se endurecerán las leyes contra las barras bravas, las cuales, según ella, se están involucrando cada vez más en las protestas.

La postura del Gobierno y futuro de las manifestaciones

Patricia Bullrich fue enfática al afirmar que el Gobierno no permitirá que la violencia tome las calles. "La violencia no se va a instalar nunca más en la Argentina", sentenció, dejando claro que los detenidos deberán enfrentar las consecuencias de sus actos. En relación a las barras bravas, la ministra adelantó que se trabaja en un proyecto de ley para endurecer las penas contra estos grupos, asegurando que aquellos que pertenecen a estas organizaciones ilícitas serán tratados con la máxima severidad.

El mensaje de Bullrich fue claro: "El que la hace, la paga. Los detenidos la van a pagar y vamos a identificar a todos los que estuvieron".