En las próximas horas, investigadores realizarán rastrillajes en tres lugares clave de la Ruta Nacional 16, en Salta, con la esperanza de hallar el cuerpo de María Cash. La zona fue identificada como parte del trayecto habitual del camionero Héctor Romero, de 71 años, quien se encuentra detenido e imputado por "homicidio agravado por alevosía".

El Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (SIFEBU), en conjunto con el Cuerpo de Investigadores Fiscales (CIF) y bajo la supervisión del fiscal Eduardo Villalba, lidera los operativos. La investigación se apoya en tecnología especializada, incluyendo drones y perros rastreadores, para recorrer tramos específicos de la ruta.

Los tres puntos clave del rastrillaje

Los tramos seleccionados abarcan áreas estratégicas a lo largo de 30 kilómetros de la Ruta 16, consideradas posibles escenarios donde Romero habría descartado el cuerpo.

La zona del Boquerón: caracterizada por su proximidad a cursos de agua y baja visibilidad, es un lugar ideal para ocultar evidencias.El Tunal: otro punto central debido a su geografía que favorece el ocultamiento.Sectores aislados de la ruta: estas áreas presentan escasa circulación vehicular y terrenos propicios para dificultar la detección.

La investigación descartó la Ruta Nacional 9/34, otro recorrido habitual del camionero, por considerarla demasiado transitada y poco viable para ocultar un cuerpo.

La geolocalización del celular de Romero resulta clave en la investigación. Según registros, el 9 de agosto de 2011, un mes después de la desaparición de María Cash, el camionero permaneció durante una hora y veinte minutos en un tramo de la Ruta 16. Este dato refuerza la hipótesis de que el cuerpo podría haber sido descartado allí.

La desaparición de María Cash

María Cash fue vista por última vez el 8 de julio de 2011, tras bajar de un micro en Salta mientras viajaba a Jujuy. Su última imagen fue captada al mediodía en una cámara de seguridad cerca de la ruta, a 6 kilómetros de la ciudad de Salta. Desde entonces, su paradero se convirtió en un misterio.

La diseñadora, que planeaba instalar un taller en el norte del país, mostró comportamientos que los investigadores calificaron como "desorientados" antes de desaparecer. Su caso sigue siendo uno de los más resonantes en la historia reciente de desapariciones en Argentina.