Florencia Marco finalmente vio justicia cuando Jorge Martínez, ex lateral de renombre y luego entrenador del equipo femenino de Boca Juniors, fue declarado culpable por abuso sexual simple en su contra. 

El tribunal dictaminó una pena de un año de prisión en suspenso, junto con otras restricciones legales. 

Además, se inició una causa paralela por falso testimonio contra Jorge Patrón Bermúdez y Marcelo Chelo Delgado, miembros del Consejo de Fútbol, quienes negaron conocimiento de la situación, a pesar de pruebas que indicaban lo contrario.

La valiente denuncia de Marco desató una cadena de eventos que expuso una cultura de acoso dentro del club. A pesar de haber notificado inicialmente al departamento de inclusión e igualdad del club y al Consejo de Fútbol, la inacción persistió, llevando a Marco a buscar justicia en el sistema judicial. Durante el juicio, testigos corroboraron su testimonio, revelando un patrón de abuso que podría involucrar a más víctimas, lo que llevó al juez a dictar la condena.

Aunque Marco ha encontrado cierto alivio en la sentencia, su futuro laboral en Boca parece incierto, ya que ha acusado al club y al presidente, Juan Román Riquelme, de no protegerla ni al equipo femenino. Mientras tanto, Martínez, destituido de su cargo tras el inicio del juicio, enfrenta una batalla legal continua, con la posibilidad de apelar la decisión del tribunal.

Por su parte, Bermúdez y Delgado enfrentan un futuro turbulento, ya que la causa por falso testimonio podría desencadenar consecuencias legales graves. Con el fiscal que lidera la investigación, siendo una figura prominente en el distrito de La Boca, el escrutinio sobre su conducta podría redefinir el panorama del fútbol argentino.