El Gobierno argentino, en una iniciativa liderada por Luis Caputo, anunció este lunes la disolución de tres fondos fiduciarios debido a problemas administrativos y financieros identificados por la Sindicatura General de la Nación (SIGEN). La decisión, oficializada mediante el Decreto 6/2025 publicado en el Boletín Oficial, afecta al Fondo Fiduciario del Servicio Universal (FFSU), el Fondo Fiduciario para la Vivienda Social y el Fideicomiso del Programa de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar (Prodaf). Estos cierres elevan a 18 el número de fondos fiduciarios disueltos por el actual gobierno, destacando la ineficiencia y falta de transparencia en su gestión.

Detalles de los Fondos Disueltos

El Fondo Fiduciario para la Vivienda Social, establecido en 2017, se dedicaba a financiar proyectos de vivienda e infraestructura básica como "Casa Propia" y "Reconstruir". Sin embargo, la SIGEN descubrió que este fondo fue empleado con fines políticos y clientelistas, presentando irregularidades en la ejecución de proyectos y una notable falta de rendición de cuentas. "Este instrumento fue utilizado con finalidades políticas y clientelísticas, y había evidenciado irregularidades e incumplimientos. En esta línea, las Auditorias efectuadas por la Sigen pusieron en relieve entre las principales deficiencias irregularidades en los proyectos financiados, falta de rendición de cuentas, y obras rescindidas sin que los fondos desembolsados hayan sido reintegrados al Estado Nacional, entre otros", señaló el Ministerio.

Por otro lado, el FFSU, creado por la Ley N° 27.078, tenía como objetivo ampliar el acceso a las tecnologías de la información, pero la auditoría reveló múltiples deficiencias, como la ausencia de una estrategia clara para la inversión y la ejecución de programas sin la debida formalidad. "Sin embargo, el instrumento evidenció múltiples deficiencias en su gestión corroboradas por los informes de la SIGEN. Entre las principales falencias se encontraban la falta de un plan estratégico para direccionar inversiones acordes a los objetivos, la ejecución de programas sin prórroga formal y proyectos aprobados sin cumplir requisitos claros, pérdidas de poder adquisitivo en las inversiones, etcétera", enumeró el Ministerio de Economía.

Finalmente, el Fondo PRODAF, cuyo propósito era mejorar la competitividad y productividad de pequeños y medianos productores rurales, fue disuelto al haberse cumplido su objetivo, sin nuevos desembolsos desde 2020. La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca confirmó la finalización de su ejecución, justificando así su disolución.

Con estas acciones, el Gobierno busca optimizar la administración de los recursos públicos, evitando el despilfarro y asegurando una gestión más transparente y eficiente, tal como concluyó el Ministerio de Economía.