María Belén Zerda, argentina de 38 años que había desaparecido en Cancún hace más de 10 días, de acuerdo a la información oficial, apareció en la selva con buen estado de salud. 

La argentina estuvo 12 días desaparecida en la ciudad mexicana, regresó a la Argentina a través de un vuelo comercial y acompañada de personal de seguridad, el cual la acompañó hasta el reencuentro con sus familiares este sábado, según confirmó uno de sus hermanos.

La mujer de 38 años aterrizó pasadas las 10 de la mañana en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, su vuelta había sido resuelto el viernes luego de que las autoridades mexicanas informaran que el personal abocado a su desesperada búsqueda la había encontrado con vida.

Tras ser identificada, Belén fue traslada a un centro de salud donde la sometieron a diferentes chequeos médicos a fin de constatar que se encontrara bien de salud. Estaba consciente y no tenía ninguna lesión más que rasguños.

¿Qué había pasado?

Más allá de que el trasfondo de lo que ocurrió aún no se conoce en detalle, sí hay una certeza y es que durante el tiempo que desapareció, la argentina estuvo inmersa en una selva de la zona. Cuando la encontraron, vestía la misma ropa que se había detallado en la denuncia.

"Estaba asustada porque la habían hostigado, amenazado. Se escondió en la selva dos semanas. No sé cómo hizo para sobrevivir", dijo Guillermo Zerda, hermano de la víctima.

La peligrosa Selva en la que se encontraba

La desapareción de Zerda volvió a poner en México el foco sobre una zona peligrosa del Estado de Quintana Roo, escenario reiterado de hallazgos de restos humanos en los últimos años.

Se trata de una de las regiones con mayor cantidad de personas desaparecidas en todo el estado. La zona, caracterizada por su vegetación espesa, caminos rurales de tierra y la presencia de grupos delictivos, representa un entorno propicio para la impunidad.

Este viernes, la mujer fue localizada con vida y sin lesiones de gravedad. La Fiscalía de Quintana Roo descartó que se haya tratado de un secuestro y atribuyó lo ocurrido a un episodio relacionado con un problema de salud mental.

"Las investigaciones preliminares no indican una privación ilegal de la libertad. Testigos afirmaron que la mujer sufre esquizofrenia y que fue en medio de un brote que se internó en la zona selvática", detalló la fiscalía en su informe oficial.