El comunicado, que informaba sobre una reunión entre la ministra de Relaciones Exteriores, Diana Mondino, y autoridades de la Cruz Roja para avanzar en un plan de identificación de caídos en el conflicto de 1982, fue publicado en la página web oficial del Ministerio de Defensa el 22 de octubre. En él, se mencionaban las islas como "Falklands/Malvinas". Sin embargo, la versión original, emitida el 16 de octubre por Cancillería, utilizaba únicamente el nombre "Malvinas".

Reacciones Cruzadas

El uso de la palabra inglesa desató un escándalo con acusaciones mutuas entre las carteras de Defensa y Relaciones Exteriores. Fuentes cercanas a Mondino afirmaron que, si se identificaba al responsable del error, sería despedido de inmediato. Mondino corroboró esta posición, enfatizando que las Malvinas "son, fueron y serán siempre argentinas" y que se tomarían medidas drásticas contra quienes atenten contra esos intereses.

Desde Defensa, se argumentó que el comunicado había sido copiado tal cual de Cancillería. Sin embargo, más tarde se reconoció que se abriría un sumario administrativo para investigar al responsable de incluir "Falklands" y que esa persona sería desvinculada.

El nombre "Falklands" no es reconocido oficialmente en Argentina; la toponimia argentina solo acepta "Malvinas". Sin embargo, en el marco de la ONU, ambos nombres pueden usarse para reflejar el carácter controvertido de la soberanía del territorio.

Negociaciones del Proyecto Humanitario

El incidente ocurre en un contexto donde Argentina y el Reino Unido acordaron relanzar el "Plan Proyecto Humanitario" para identificar soldados argentinos fallecidos durante la guerra de Malvinas. Este será el tercer plan de este tipo, facilitado por la Cruz Roja Internacional y diseñado para ayudar a identificar a aquellos cuyos restos están en tumbas sin nombre o mal identificadas.