Este viernes, un video de Martín Ku y Nicolás Grosman, ex participantes de Gran Hermano 2023, causó gran revuelo en las redes sociales. En el clip, ambos convocaban a mujeres de entre 18 y 22 años para trabajar en Rusia, ofreciendo un salario de entre 860 a 1000 dólares. La propuesta rápidamente fue acusada de ser una estafa, lo que generó una ola de críticas hacia los influencers.

El descargo de Martín Ku

Cansado de las acusaciones, Martín Ku decidió romper el silencio y publicó un comunicado en su cuenta de Instagram para aclarar la situación. En el texto, explicó que tanto él como Nicolás habían sido convocados por una agencia para participar en una campaña de promoción internacional en Rusia, la cual consideraron una "experiencia educativa y laboral".

"Queremos hablar con claridad sobre el trabajo que realizamos en Rusia y las repercusiones que surgieron. Nos presentaron una propuesta profesional clara, con objetivos definidos", comenzó Ku, quien además insistió en que en ningún momento fueron advertidos sobre irregularidades o estafas.

Rechazo a las acusaciones

Martín Ku dejó en claro que su rol se limitó a comunicar una experiencia desde lo que vivieron durante su estancia en Rusia. "No formamos parte del programa ni tuvimos acceso a información más allá de lo que cualquier visitante podría ver", explicó. Además, indicó que el contenido que habían publicado fue eliminado por Instagram, no por ellos.

En su mensaje, también expresó su preocupación por las acusaciones infundadas que circulaban en redes sociales, y se mostró disponible para aclarar cualquier inquietud futura.

Qué dijeron en el video

En el video que desató la polémica, Martín Ku y Nicolás Grosman animaban a mujeres jóvenes a postularse a un programa de empleo en Rusia. "Si sos una chica entre 18 y 22 años y tenés ganas de trabajar en el exterior, ¡esto puede ser para vos!", comentaron en el video, recomendando que se registraran en una página web para más detalles.

El mensaje fue interpretado por muchos como una promoción poco clara, lo que llevó a las acusaciones de estafa. Sin embargo, tanto Ku como Grosman negaron cualquier vinculación con la organización del programa y defendieron la naturaleza del contenido publicado.