Negociaciones entre Casa Rosada y el Congreso: la tensión volvió a escalar entre Milei y Villarruel

Días cruciales para las negociaciones entre el Gobierno y la oposición y el vínculo del presidente y su vice.

En medio del escándalo por la denuncia de Fabiola Yañez contra el ex presidente Alberto Fernández, el gobierno, la oposición y los aliados llevan semanas inmersos en negociaciones complejas cuyo desenlace parece inminente en varios temas críticos, especialmente seguidos por el Ejecutivo.

La tensión entre el presidente Javier Milei y la vicepresidenta Victoria Villarruel ha vuelto a escalar en las últimas horas, complicando aún más las negociaciones en curso. Uno de los temas más polémicos es la designación de la presidencia de la comisión bicameral de Inteligencia, que se ha visto empañada por un nuevo conflicto entre Milei y Villarruel, ahora relacionado con el reciente aumento en la dieta de los senadores, que alcanzará los $9 millones el próximo mes.

Una alta fuente oficial reveló que los kirchneristas han logrado un acuerdo con el senador radical Martín Lousteau, quien está entre los candidatos a presidir la comisión encargada de supervisar el presupuesto y funcionamiento de la Secretaría de Inteligencia (SIDE), que recibió $100.000 millones adicionales el mes pasado mediante un DNU. Para el gobierno, las próximas 48 horas serán cruciales, ya que la oposición ha convocado a una sesión especial en Diputados para intentar anular ese decreto.

Aunque Lousteau ha mantenido una postura crítica hacia el oficialismo, especialmente en temas relacionados con el financiamiento de las universidades, su sector mantiene conversaciones fluidas con el gobierno, representado por Santiago Caputo, el asesor principal de Milei. Caputo había expresado su preferencia por el senador peronista Edgardo Kueider para presidir la comisión de inteligencia, pero el rechazo del kirchnerismo complicó la situación, dejando al Ejecutivo en una posición vulnerable.

Simultáneamente, el gobierno busca desactivar la sesión especial convocada para este miércoles por el bloque Encuentro Federal, liderado por Miguel Ángel Pichetto, y la Coalición Cívica, quienes intentan revertir el DNU que asignó fondos adicionales a la SIDE. Este tema ha generado una fuerte preocupación en la administración, especialmente después de que Milei despidiera a dos altos funcionarios de la ex AFI, lo que aumentó la influencia de Caputo en esa área.

Por otro lado, la oposición ha mostrado desacuerdo sobre la designación de los tres auditores de la Auditoría General de la Nación (AGN) por la Cámara de Diputados. Aunque se había alcanzado un consenso preliminar para nominar a Mario Negri (UCR) y a Jorge Triaca (PRO), aún queda por definir el candidato del PJ, lo que ha generado tensiones internas.

Mientras tanto, el Consejo Federal de Inversiones (CFI) se enfrenta a una disputa por su jefatura, que actualmente ostenta Ignacio Lamothe, cuyo mandato vence en noviembre. Los gobernadores de Juntos por el Cambio han propuesto un candidato, lo que podría contar con el respaldo del Ejecutivo.

En medio de todas estas disputas, la relación entre Villarruel y la Casa Rosada ha vuelto a tensarse, especialmente después de los desacuerdos en torno a los homenajes del 17 de agosto. La vicepresidenta ha tenido una relación cada vez más distante con Karina Milei y Santiago Caputo, los dos colaboradores más cercanos al presidente. Recientemente, Villarruel y Milei intercambiaron indirectas en redes sociales sobre el aumento salarial de los senadores, lo que refleja la profundidad del conflicto.

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