La Universidad Nacional de Tucumán (UNT) registra pérdidas históricas debido a la gestión de sus viviendas en Horco Molle. Según un informe con datos del año 2016, alrededor de diez casas del complejo estuvieron ocupadas durante años por personas que no pagaban por su uso.

OCUPANTES Y SITUACIONES IRREGULARES

El informe menciona que entre los ocupantes figuran funcionarios y exfuncionarios universitarios, un camarista y un sindicalista, quienes argumentaron no residir o no haber residido nunca en las propiedades. En el listado de ocupantes figuran nombres como el entonces secretario de Asuntos Estudiantiles, Sergio Aragón, y el expresidente del Colegio de Ingenieros Civiles, Luis Antolini. Aragón afirmó que su vivienda estaba destinada a actividades de la secretaría, aunque permanecía vacía gran parte del año. Antolini, por su parte, admitió haber ocupado la propiedad durante aproximadamente tres años, aunque recibió notificaciones para desalojar. La situación se complica con casos como el de Adriana Marín, una docente que residió en una vivienda registrada como "desocupada", pero que en su momento esgrimió no poder abandonarla debido a la presencia de sus hijos.

Asimismo, el exsecretario general del gremio de no docentes, Hugo Ángel Morales, quien también fue inquilino de una vivienda, sostiene que entregó la llave mucho antes del 2016, aunque su nombre sigue en la lista de deudores. Otros ocupantes han buscado regularizar su situación, pero la UNT ha lidiado durante años con un considerable número de inquilinos que no cumplían con sus obligaciones, lo que ha generado grandes pérdidas para la universidad.

FALENCIAS EN LA GESTIÓN ADMINISTRATIVA

La situación en Horco Molle pone de manifiesto las débiles prácticas políticas en la UNT. Históricamente, la asignación de viviendas ha estado ligada a compromisos políticos, permitiendo que algunos funcionarios se beneficien sin cumplir con las normativas. Aunque se implementó un nuevo reglamento en marzo de 2016 para el uso de estas propiedades, muchos inquilinos continuaron operando sin contrato formal.

DESAFÍOS Y EXPECTATIVAS EN LA UNT

En un contexto donde se discute el presupuesto universitario desde el Gobierno Nacional, la UNT enfrenta pérdidas económicas y la fuga de recursos se ha convertido en una prioridad. Se espera que se presenten nuevos informes que promuevan una mayor transparencia en la gestión de estas propiedades. La comunidad universitaria demanda respuestas y una administración más rigurosa.

La problemática de las viviendas en Horco Molle refleja las deficiencias en la gestión administrativa de la UNT y la necesidad de establecer un sistema más justo y transparente. Los datos del 2016 evidencian la falta de cumplimiento en las normativas que deberían regular el uso de estos espacios. La búsqueda de una solución efectiva requerirá un esfuerzo conjunto entre las autoridades y la comunidad universitaria, con el objetivo de recuperar recursos y restaurar la confianza en la gestión institucional.con info de lagaceta.com.ar