El caso por robo de agua en Yerba Buena sigue avanzando, y este martes se llevó a cabo, a través de una audiencia por Zoom, la formalización de la investigación contra Juan Zamora, el dueño de la finca involucrada. La Unidad Fiscal de Usurpaciones, Estafas y Cibercriminalidad I, representada por el auxiliar de fiscal Rodrigo Bilbao, solicitó medidas para evitar que el empresario, que se encuentra en Roma, Italia, eluda la Justicia.

Medidas solicitadas por la Fiscalía

La acusación contra Zamora es clara: se lo señala por haber instalado una conexión clandestina que desvió el caudal de agua destinado a la reserva Lomas de Imbaud, concesionada por la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT). El fiscal solicitó que se fije una caución de $100.000.000 y que Zamora entregue su pasaporte en un plazo de 10 días para evitar el riesgo de fuga y posibles obstáculos en la investigación.

El juez interviniente, aunque no accedió a todas las demandas del Ministerio Público Fiscal (MPF), impuso restricciones. Zamora deberá mantenerse a disposición del tribunal, presentar domicilio y asistir cada mes a la comisaría más cercana. Además, se le prohibió salir del país sin autorización por seis meses.

El robo de agua y sus consecuencias

Todo comenzó en mayo de 2023, cuando se detectó la manipulación del acueducto central que abastece la reserva Lomas de Imbaud. La SAT descubrió que parte del agua potable estaba siendo desviada hacia una laguna artificial en la propiedad de Zamora, afectando gravemente el suministro de agua potable en Yerba Buena. La denuncia, radicada en septiembre, desencadenó la investigación que sigue en marcha.

Durante un allanamiento realizado este lunes en la finca, se constató que la laguna ilegal tiene una superficie de 8.900 metros cuadrados y una capacidad de 53.400 metros cúbicos, con un sistema de exclusa para evacuar el agua. Además, la SAT sigue investigando otras posibles conexiones clandestinas en la zona.

Este caso ha generado gran preocupación, ya que el agua es un recurso limitado. El fiscal Bilbao subrayó: "El agua es un bien común, esencial y finito, y su aprovechamiento debe ser racional y equitativo". Con más testimonios y análisis satelitales, la causa sigue adelante, buscando esclarecer el impacto del robo en la comunidad de Yerba Buena.Foto: Pablo Salcedo - La Gaceta