¿Se cayeron las caretas?

Patricio Adorno Politólogo y Docente

Que difícil debe ser, amigo lector, tener que sostener todo el tiempo un personaje, sobre todo cuando uno pasa gran parte de su tiempo expuesto al escrutinio público. Debe ser complejo tener que medir todo el tiempo las palabras, cuidar los gestos, evaluar las interpretaciones de lo que se dice o hace para evitar que, la máscara que se lleva puesta, caiga por su propio peso. Sobre todo cuando la distancia entre lo que se aparenta y lo que se es, se agiganta.

Algo de eso pasó, esta semana, tanto en el plano nacional como en el provincial.

Allá, en Buenos Aires, arrancamos enterándonos de la nueva propuesta audiovisual del gobierno. Una especie de 678 libertario desprovisto, eso sí, de las molestas intermediaciones del periodismo ensobrado que, en palabras del propio Milei, siempre juega sucio. Resulta que, el Ministerio de Economía de la Nación (MECON) con el "toto" a la cabeza, inauguró su propio programa de streaming para que, todos los argentinos, puedan enterarse de primera mano en qué anda el gobierno.

Ojo, si me apura un poco, amigo lector, le diría que el único caso reciente que me viene a la memoria es el ciclo "Con Maduro +", conducido por el mismísimo Nicolás que, esta semana, pidió la prisión para el último candidato opositor que osó desafiar electoralmente a su gobierno. Por eso, le pido que no me apure, no vaya a ser cosa que, por apresurarnos, pasemos por alto algunos detalles que pueden ser importantes.

Detalles como que, en la primera edición del nuevo ciclo del MECON donde, además de responder algunas preguntas sobre el blanqueo, trajeron a un especialista a explicar cómo entrar al RIGI. Si usted, como yo, pensó que el especialista era el funcionario que había redactado la norma, entonces se habrá equivocado. O al menos lo habrá hecho en parte.

Es que el "especialista" es Ángel Liban Kusa, socio de uno de los estudios legales más grandes del país y que, vaya casualidad, entre los servicios que ofrece a sus clientes está la elaboración del pliego de proyectos para entrar al RIGI. Por si fuera poco, y a modo de dato de color, Liban Kusa fue, en su momento, señalado como uno de los autores intelectuales del RIGI.

Si usted tuviera 200 palos verdes para invertir y no sabe cómo hacer para aplicar al régimen de beneficios. ¿A qué estudio de abogados preguntaría? ¿Irá al que tiene un socio explicando al ministro de Economía como funcionan los beneficios o al que no lo tiene? Parece que eso es, aparentemente, competencia desleal. ¿No lo cree?

De todos modos, coincidirá conmigo en que es encomiable la voluntad del gobierno por acercarse a la ciudadanía, sobre todo en momentos en los que se empieza a complicar la chance de hacer algunas (o muchas) preguntas.

Es que, así como el Javo logró las tres derrotas parlamentarias más rápidas de la historia, esta semana también consiguió que, en menos de 24 horas, periodistas, ONGs y hasta el PRO le salieran al cruce.

Resulta que, como quien no quiere la cosa, en una entrevista el Javo le respondió a Majul que él no daba conferencias de prensa porque los periodistas ensobrados jugaban sucio y que, como único remedio, había que volverlos personas políticamente expuestas. De suceder, los periodistas tendrían que empezar a justificar hasta el último centavo que reciben. La cara de Luisito, al escucharlo, quedará para los anales de la historia.

Eso sí, de pasada y por las dudas, el Javo reglamentó la Ley de Acceso a la Información Pública. Es esa norma, que impulsó Macri, la que permitió conocer, por ejemplo, el Vacunatorio VIP y la jodita de Olivos. Resulta que, ahora, los funcionarios no sólo pueden decidir qué información mostrar sino que, más controvertido aún, pueden decidir si el pedido se hizo con mala fe y, en ese caso, denunciar judicialmente a quién lo haya hecho. ¿Quedarán muchos periodistas con ganas de preguntar?.

Por si fuera poco, y ante la crítica de todo el arco opositor, la cuenta atribuida al todopoderoso asesor monotributista volvió a sacarse la careta y, sin pruritos, parafraseó una frase que quedó en la historia: "Si quieren reglamentar la ley, armen un partido y ganen elecciones".

Hay quienes dicen que, apenas apareció el post, El Killer empezó a recibir mensajes en su teléfono con una pregunta recurrente "¿Cuánto más vamos a bancar, Mauricio?".

Una pregunta muy parecida a la que, puertas adentro, le hicieron al Javo cuando se conoció el affaire de Esteban Abdala, el senador libertario que, sin sonrojarse confirmó que, de sus 20 asesores en el Senado, tiene a 15 trabajando para su candidatura a gobernador en San Juan. Candidatura para la cual, con suerte, todavía le faltan tres años y medio. Quién diría que, a menos de diez meses de ser electos, ya hay libertarios trabajando para su siguiente cargo público ¡Qué rápido crecen!

Y, sin embargo amigo lector, en Tucumán también pasaron cosas. Y bastante raras.

Resulta que, las empresas de transporte público de pasajeros, sostienen estar endeudadas y prestar un servicio deficitario, que tienen que poner todos los meses de sus bolsillos para mantener andando a los vehículos y contratados a los trabajadores. Lo raro es que sólo fueron al paro las líneas urbanas (esas que van del 1 al 19), aunque muchas pertenecen a las mismas empresas que tienen las concesiones de las líneas interurbanas y que, vea usted, siguieron prestando el servicio con normalidad en el resto de la provincia.

Por si fuera poco, los empresarios mandaron por lo menos 200 telegramas de despido y pusieron en pie de guerra a UTA (el gremio de los choferes) que, rápidamente fue a protestar frente al municipio de la capital. ¿No era que tenían que llegarse por el Ministerio de Trabajo de la provincia?

Para sumar confusión, no hay explicaciones claras. Hay quienes dicen que los empresarios lo hicieron para presionar al municipio y forzar un aumento del precio del boleto, suponiendo que, como en otras oportunidades, el aumento en la capital rápidamente se reflejaría en el resto de la provincia. Otros, por el contrario, afirman que en realidad buscaban presionar para que se aumente el subsidio que el municipio paga para mantener el Boleto Estudiantil Gratuito y, añaden en esta misma línea, que la municipalidad debería hacerse cargo de una parte de los subsidios que el gobierno nacional dejó de mandar para sostener al sector.

No obstante, hay una tercera corriente de intérpretes. Esos a los que les gustan los enredos y ven causas donde, en teoría, sólo hay coincidencias.

Ellos son los que pusieron un ojo en el llamativo timing del conflicto con la ausencia de Chahla. Los que siguieron con curiosidad la política de "laisse passer" enarbolada por un Jaldo que, casi sin querer, retomó el viejo dicho de que "los comedidos siempre salen jodidos". Y, también, son los mismos que escucharon con atención la llamativa mención a "la siembra de un terreno fértil para empresas de afuera" que hicieron los empresarios del transporte, cuál eco de aquella vieja idea para dividir a las empresas de recolección de residuos.

Por supuesto, amigo lector, si usted les pregunta a estos mismos intérpretes si es que, acaso, insinúan la existencia de un pase de facturas que "esmerile" a la intendente capitalina, medirán sus palabras, cuidarán los gestos y, por supuesto, se lo negarán enfáticamente.

¿Fin?

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