El tránsito continúa interrumpido en la ruta 338 debido a los deslizamientos de tierra provocados por las intensas lluvias en Tucumán. Vialidad trabaja en la limpieza de la calzada, pero el terreno sigue inestable.

El mal clima complica los trabajos

Las lluvias recientes provocaron un derrumbe que cubrió toda la calzada de la ruta 338, lo que obligó a la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) a interrumpir el tránsito. Aunque los equipos trabajan en la remoción del material, el clima adverso impide la estabilización del terreno y aumenta el riesgo de nuevos deslizamientos.

El corte total de la ruta busca evitar accidentes, ya que la persistencia de las precipitaciones podría generar más derrumbes. Pablo Díaz, director de Vialidad, explicó que los operarios continuarán con las tareas hasta garantizar la seguridad del camino. "Mientras sigan las lluvias, no podremos saber cuándo quedará liberado el paso completamente", advirtió.