Este martes, un tiroteo en un centro de enseñanza para adultos en Orebro, Suecia, dejó un saldo de 10 personas fallecidas, incluido el atacante. El incidente ocurrió en el campus de Risbergska, ubicado a 200 km al oeste de Estocolmo. Roberto Eid Forest, jefe de la policía local, confirmó el número de víctimas y aseguró que el autor no tenía vínculos con pandillas ni antecedentes penales.

"El autor no es conocido por la policía y no tiene vínculos con ninguna banda. Creemos que no habrá más ataques", declaró Forest en una rueda de prensa. Las autoridades aún no han revelado detalles sobre las motivaciones del atacante ni la identidad de las víctimas, que podrían ser tanto alumnos como profesores.

Perfil del atacante y reacciones al tiroteo

Según la cadena de televisión TV4, el presunto autor del tiroteo era un hombre de 35 años con licencia para portar armas. Aunque no tenía antecedentes penales, su perfil y motivaciones siguen siendo un misterio para las autoridades.

El tiroteo generó una fuerte conmoción en Suecia, un país donde este tipo de ataques son poco frecuentes. Petter Kraftling, un docente del centro, relató su experiencia: "Escuché disparos, así que me atrincheré. Y estoy esperando noticias. Hemos activado una alarma en la aplicación de seguridad y me estoy comunicando con mis colegas".

El primer ministro sueco, Ulf Kristersson, expresó su dolor en las redes sociales: "Me entristeció enterarme del terrible acto de violencia que tuvo lugar en Orebro. Mis pensamientos están con las víctimas y sus familias".

Aumento de la violencia en Suecia

Aunque los ataques en centros educativos son raros en Suecia, el país ha registrado un incremento en tiroteos y actos violentos vinculados a pandillas en los últimos años. Estos incidentes dejan, en promedio, una decena de muertos anualmente.

Tras el tiroteo, las autoridades confinaron a los estudiantes de la escuela y de establecimientos cercanos "por razones de seguridad". Además, se desplegó un amplio operativo policial y de emergencias en la zona.

El caso está siendo investigado como "intento de asesinato, incendio premeditado y delito agravado de armas". Mientras tanto, el país intenta procesar el impacto de este trágico suceso, que ha dejado a la comunidad en estado de shock.