Andrí Kovalenko, jefe del Centro ucraniano para Contrarrestar la Desinformación, compartió en Telegram que la ofensiva generó preocupación en las tropas rusas: "En Kursk, los rusos están muy preocupados porque fueron atacados desde varias direcciones. Esto les sorprenderá", afirmó. Además, subrayó que las fuerzas ucranianas "están trabajando" para mantener la presión.

"Rusia está recibiendo lo que merece", afirman desde Ucrania

Por su parte, Andrí Yermak, jefe de gabinete del presidente Volodímir Zelenski, celebró el alcance de la operación: "Buenas noticias en Kursk: Rusia está recibiendo lo que se merece". Mientras tanto, el Estado Mayor General de Ucrania evitó referirse a estos eventos en su informe matutino, aunque destacó que Rusia realizó 33 ataques en la zona durante la última jornada, utilizando artillería, misiles antitanques y ataques aéreos.

Zelenski también señaló que las tropas rusas y norcoreanas sufrieron "grandes pérdidas" en los combates recientes, asegurando que cerca de Makhnovka, en Kursk, las bajas alcanzaron un batallón completo compuesto por infantería norcoreana y paracaidistas rusos.

Situación actual en Kursk y el impacto del conflicto

Desde que Ucrania ingresó a Kursk en agosto de 2024, las fuerzas ucranianas lograron controlar 1.100 kilómetros cuadrados en un mes. Sin embargo, la contraofensiva rusa, apoyada por soldados norcoreanos, recuperó más de la mitad del territorio en disputa. Según el portal especializado ‘Militarnyi', a finales de 2024, Ucrania mantenía bajo su control unos 460 kilómetros cuadrados en la región.

Mientras Rusia controla alrededor del 20 % del territorio ucraniano, la guerra sigue marcada por altas pérdidas humanas y materiales. A pesar de los avances ucranianos, las necesidades de personal en el frente y el apoyo occidental continúan siendo desafíos críticos para Kiev.