El Gobierno presiona a la AFA y Conmebol para evitar el Sudamericano Sub-20 en Venezuela
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, señaló que la competencia pone en riesgo la libertad de los jugadores. La disputa entre política y deporte crece mientras se acerca la fecha del torneo.
El Gobierno de argentino intensificó sus esfuerzos para evitar que el Sudamericano Sub-20 se juegue en Venezuela, territorio bajo el control del régimen de Nicolás Maduro. La presión proviene principalmente del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, quien expresó su preocupación sobre la seguridad y la libertad de los jugadores, considerando que el torneo, programado entre el 23 de enero y el 16 de febrero, representa un riesgo bajo la actual situación política en Venezuela.
En sus declaraciones, Francos se sumó al pedido de la líder de Patricia Bullrich, quien había cuestionado previamente la posibilidad de que el régimen chavista pueda secuestrar a los jugadores argentinos. "Pone en riesgo la libertad de los jugadores", señaló Francos en referencia a la situación política y social en Venezuela.
Aseguró que no tiene sentido priorizar el fútbol en un contexto de violaciones a las libertades fundamentales y recalcó que el deporte no debe estar por encima de la política y los derechos humanos.
En la misma línea, el jefe de Gabinete cuestionó que el presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio CHIQUI Tapia, haya decidido que la selección juvenil viaje a Venezuela, desestimando las advertencias de seguridad. "Es ridículo que se quiera jugar un campeonato internacional en un país que no respeta las libertades", manifestó Francos.
La controversia se intensificó luego de que Patricia Bullrich pidiera el cambio de sede del torneo, sugiriendo que el gobierno argentino debería actuar para evitar que los jugadores enfrenten un ambiente hostil en un país gobernado por un régimen dictatorial. Sin embargo, la AFA reafirmó su decisión de enviar a la selección Sub-20 a Venezuela, lo que generó tensiones tanto dentro de la política como del deporte.
Guillermo Francos no descartó que puedan llevarse a cabo más conversaciones con la AFA y la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) en los próximos días, para buscar alternativas que puedan garantizar la seguridad de los jugadores. "Si yo fuera el responsable del fútbol en Latinoamérica, trataría de que el campeonato se suspenda o se juegue en otro lugar", añadió.
El ministro coordinador también se refirió al caso del gendarme argentino Nahuel Gallo, quien lleva más de un mes detenido en Venezuela bajo acusaciones que considera infundadas. Francos calificó su detención como "ilegal" y "contraria a la Convención de los Derechos Humanos", denunciando que las justificaciones por parte del régimen venezolano eran "ridículas".