Cómo reducir los gastos con una dieta económica
Enterate cómo podes organizarte para alimentarte bien y no gastar de más.
Cuando alguien decide comenzar un proceso de adelgazamiento, se enfrenta a la necesidad de modificar sus hábitos diarios: incorporar ejercicio, seguir una alimentación equilibrada y eliminar ciertos alimentos menos saludables de su dieta.
Muchos creen que estos cambios impactarán negativamente en su presupuesto, ya que tendrán que optar por alimentos más costosos. Sin embargo, esta percepción no siempre es correcta.
Aunque varios estudios han vinculado la obesidad con los sectores más desfavorecidos de la población, el tema va más allá del acceso a determinados alimentos, involucra también educación alimentaria.
Adoptar una dieta saludable y equilibrada no necesariamente implica un gasto elevado. Por ello, hemos preparado una serie de consejos para comer de manera saludable sin gastar demasiado en el proceso de pérdida de peso.
Productos cultivados
Los expertos sugieren considerar la compra de productos orgánicos por su menor contenido de pesticidas y aditivos. No obstante, dado que su precio suele ser más alto que el de los productos convencionales, una alternativa es adquirir alimentos en tiendas locales que ofrecen productos cultivados en la zona, los cuales, aunque no sean orgánicos, pueden ser más saludables que los productos industriales que viajan largas distancias hasta llegar al consumidor final.
La nutricionista Keri Glassman sugiere una forma de ahorrar es aprovechar las sobras. Por ejemplo, en lugar de comprar ensaladas costosas a diario, se pueden preparar en casa utilizando verduras frescas y añadiendo sobras de proteínas como pollo o salmón. Otra estrategia para reducir los gastos es planificar los menús con anticipación y comprar los ingredientes necesarios en cantidades suficientes para varias comidas.
Los amantes de la carne pueden optar por comprar menos cantidad pero de mejor calidad, complementando su ingesta de proteínas con alternativas más económicas como legumbres o huevos. Además, se recomienda considerar las marcas blancas al comprar productos en el supermercado, ya que suelen ofrecer precios más bajos con ingredientes similares a las marcas reconocidas.
Envases grandes
Evitar comprar envases individuales también puede ayudar a reducir los gastos, ya que los productos en envases grandes suelen ser más económicos.
Además, sustituir las bebidas azucaradas por agua es una forma efectiva de ahorrar dinero y reducir la ingesta de calorías. Por último, cultivar una pequeña huerta en casa, ya sea en el campo o en una parcela urbana, puede ser una excelente manera de obtener productos frescos y saludables sin gastar demasiado.
En resumen, perder peso no tiene por qué implicar un gasto excesivo en el supermercado. Con planificación, creatividad y compromiso, es posible seguir una dieta saludable y equilibrada sin sacrificar el presupuesto.
