De qué trata el nuevo programa nacional que revoluciona los trasplantes renales en Argentina
El Gobierno implementó tecnología de última generación para mejorar los trasplantes de riñón en todo el país.
Con más de 5.500 personas en lista de espera para un trasplante de riñón, Argentina dio un paso crucial en la mejora del sistema de trasplantes con la creación del Programa Nacional de Perfusión Renal. Este innovador proyecto, impulsado por el Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (INCUCAI), utiliza máquinas de perfusión hipotérmica que permiten preservar y evaluar los riñones de donantes en condiciones óptimas antes de ser implantados.
Gracias a esta tecnología, los órganos pueden ser trasladados a mayores distancias sin comprometer su calidad, aumentando las posibilidades de trasplantes exitosos y reduciendo la necesidad de diálisis posterior. Durante la etapa piloto iniciada en 2023, se logró perfundir 43 riñones, de los cuales 37 fueron implantados exitosamente.
EN QUÉ CONSISTE EL PROGRAMA NACIONAL DE PERFUSIÓN RENAL
Las máquinas de perfusión renales marcan un antes y un después en la conservación de órganos. Este sistema extracorpóreo mantiene los riñones en condiciones activas durante su traslado, extendiendo el tiempo de isquemia y asegurando que el órgano llegue en el mejor estado posible para el trasplante.
Además de optimizar la calidad de los órganos, este método permite evaluar su funcionamiento en tiempo real, lo que minimiza los rechazos y falla primaria del injerto. Según explicó el doctor Rubén Schiavelli, jefe de Nefrología y Trasplante Renal del Hospital Argerich, "la tecnología no solo mejora la sobrevida del órgano, sino que también reduce significativamente la necesidad de diálisis posterior".
IMPACTO POSITIVO EN LA SALUD Y LA ECONOMÍA
El uso de estas máquinas también genera beneficios económicos al acortar las estadías hospitalarias y reducir la necesidad de terapias sustitutivas como la diálisis. A nivel social, el programa fomenta una mayor equidad en el acceso a los trasplantes, al facilitar la distribución de riñones en todo el país, incluso en regiones alejadas.
La implementación del programa incluye la instalación de máquinas de perfusión en hospitales clave de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, y se espera seguir ampliando la red para cubrir más provincias. Este modelo nacional no solo optimiza el uso de órganos que antes podían descartarse, sino que también fortalece el sistema sanitario y la calidad de vida de los pacientes trasplantados.
DONAR SALVA VIDAS: EL EJE FUNDAMENTAL DEL PROGRAMA
El INCUCAI destacó que el éxito del programa depende de la colaboración de todos los actores del sistema de salud y de la sociedad. Sin donantes, no hay trasplantes, y este avance tecnológico resalta la importancia de fomentar la cultura de la donación en Argentina.