Un escándalo sin precedentes sacudió el hotel CasaSur, cuando Liam Payne, exintegrante de One Direction, contrató a dos prostitutas antes de su muerte, pero todo terminó en un desastre. Las mujeres, oriundas de El Talar e Isidro Casanova, revelaron detalles sorprendentes de la noche en que el cantante les prometió cinco mil dólares, pero nunca pagó. Lo que siguió fue una tensa situación en el lobby del hotel y el misterio de un reloj Rolex perdido.

La noche en que Liam Payne contrató a dos prostitutas

El día de su muerte, Liam Payne, tras haber desayunado whisky, abrió su laptop Mac en su habitación en el tercer piso del hotel CasaSur. A través de un popular sitio de escorts, Gemidos, contactó a dos mujeres por separado, quienes no se conocían entre sí. Ambas eran trabajadoras sexuales, pero no del mundo del lujo: eran madres solteras con dificultades económicas que trabajaban a través de publicaciones en Internet.

En sus conversaciones por WhatsApp, Payne prometió a las mujeres un pago de cinco mil dólares por sus servicios. A su llegada al hotel, las prostitutas entregaron sus documentos al personal para ser fotocopiados, lo que más tarde permitió a la policía identificarlas. Después de que ingresaron al hotel, Payne hizo un pedido de room service que incluía whisky, champagne Möet Chandon (que el hotel no tenía), y 300 dólares en efectivo.

El whisky, las promesas de amor y el Rolex

El cantante mantuvo una actitud extrañamente romántica durante la noche. Según las prostitutas, Payne se arrodillaba y les repetía constantemente "I love you, I love you", incluso prometiéndoles su reloj Rolex. A pesar de su comportamiento caballeroso, las promesas de dinero y amor quedaron en el aire.

Después de un encuentro sexual, las mujeres se sentaron en el lobby del hotel, esperando que el cantante cumpliera su promesa de pago. Al llegar, Payne se volvió a poner de rodillas y repitió sus promesas, pero no entregó el dinero acordado. Esto desató un pequeño escándalo, y Rogelio Nores, empresario y conocido de Payne, intervino para resolver la situación. Según las fuentes, se realizó un pago parcial, muy inferior a los cinco mil dólares acordados.

El Rolex desaparecido y el allanamiento

En medio de la confusión, una de las mujeres olvidó su maquillaje en la habitación y Payne la acompañó para recuperarlo. Fue entonces cuando el reloj Rolex de Payne desapareció misteriosamente. Las mujeres fueron allanadas poco después por la policía, quienes no encontraron el reloj. El caso sigue siendo un misterio, y el Rolex nunca apareció.

El asunto tomó un giro aún más sombrío cuando, poco después de que las prostitutas se marcharan, Payne falleció. Investigadores creen que los 300 dólares solicitados a room service no eran para las mujeres, sino para pagarle a un posible dealer.

Por el momento, las trabajadoras sexuales no son consideradas imputadas en el caso, aunque sus teléfonos y los de Payne siguen siendo parte de la investigación. El abogado de las mujeres, Martín Castillo, se presentó para acceder a los contenidos del expediente, especialmente en relación con los teléfonos de las mujeres.

El misterio en torno al Rolex perdido y las promesas de Liam Payne continúa, mientras la justicia sigue investigando los pormenores de una noche que terminó en tragedia.